Castilla y León ha registrado entre mayo y junio de 2020 un número de fallecimientos similar al de años anteriores con un leve incremento del 0,6 por ciento con respecto a 2019, del total, el 12,4 por ciento de las muertes es atribuible al COVID-19, según han informado este martes fuentes del TSJCyL.
En concreto, el número de licencias de enterramiento expedidas por los Registros Civiles ha aumentado un 0,6 por ciento respecto a 2019 y un 1,1 por ciento a 2018.
En términos absolutos, en mayo y junio del presente año se han registrado un total de 4.178 fallecimientos, mientras que en 2019 se contabilizaron 4.021 en los mismos meses y 4.005 en 2018.
Según los datos aportados por el TSJ las muertes por COVID-19 y por causas compatibles con la pandemia en mayo y junio suman un total de 503, lo que supone un 12,4 por ciento de todas las licencias de enterramiento solicitadas en los Juzgados de Registro Civil.
Como aclara el TSJ, los fallecimientos por causas sospechosas compatibles con Covid-19 se refieren a aquellas en cuyas certificaciones médicas existen procesos patológicos que pueden haber sido causados por la pandemia.
Por provincias, Valladolid ha sido la que más fallecimientos ha registrado con COVID o sospecha con 125 en mayo y junio de un total de 797 fallecimientos, seguida de Salamanca con 120 de un total de 541; León con 73 con el virus o sospecha de un total de 884; Burgos con 61 de un total de 617; Ávila con 53 de un total de 264; Zamora con 37 de un total de 333 fallecimientos y Palencia con 27 de 330.
En último lugar se situaron Segovia con seis de un total de 214 y Soria con uno de un total de 198, no obstante en estas dos provincias no se contabilizaron los datos de fallecidos con COVID o sospechas en mayo porque el Registro Civil de las capitales no pudieron precisar detalles porque las actas de defunción habían sido ya remitidas al INE cuando recibieron la solicitud de datos del presidente del TSJCyL.