Los helados más famosos (y baratos) de Lidl que barren a los de marca

Uno de los grandes placeres del verano son los helados. Es cierto que podemos comprarlos en cualquier época del año y, de hecho, los amantes de este frío dulce, no prescinden de él ni siquiera en invierno. Pero el calor nos inclina más a su consumo y además es cuando abren las heladerías, que nos tientan con sus decenas de sabores diferentes. También los supermercados tienen que reponer con más frecuencia sus congeladores para abastecer a los clientes que quieren disfrutar de un delicioso postre veraniego.

En Lidl, la oferta de helados es amplia y cuenta con variedades que no tienen nada que envidiarle a las marcas más conocidas. También podemos encontrar algunos helados únicos y exclusivos del supermercado alemán, todos ellos de una excelente calidad y un precio de escándalo. Aquí te recomendamos los favoritos de los consumidores. 

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ORIGEN DE LOS HELADOS 

Pero antes, un par de datos curiosos. ¿Quién inventó el helado? Las gracias se las tenemos que dar a Procopio, un señor italiano que en 1660 se inventó una máquina que trituraba de manera homogénea la fruta, el hielo y el azúcar, obteniendo la mezcla cremosa que conocemos hoy día. No quiso desvelar el secreto, pero obviamente se filtró y en el siglo XVIII ya aparecía en los tratados de cocina.

Mucho antes, en la roma antigua y aún antes, en la china de antes de Jesucristo, ya se preparaban mezclas de nieve con frutas o con miel. En España, los helados no llegaron hasta bien entrado el s. XIX porque traer hielo al país era una tarea complicada, ya que había que traerlo desde Inglaterra o desde los Estados Unidos. Pero fue la máquina de Procopio quien hizo posible que hoy día Lidl cuente con algunos de los helados más ricos del mercado.

 

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