Cómo elegir una contraseña segura para no tener que estar cambiando cada dos por tres

Contraseña para el móvil, para la tarjeta de crédito, paras las redes sociales, para el ordenador, para el correo electrónico…nuestra vida se ha convertido en esto. Por lo tanto, hay que saber elegirlas bien porque de lo contrario los piratas informáticos siempre pueden estar al acecho. Además, con tantos números y dígitos seguro que nos olvidamos de ellas y nos toca estar cambiándolas cada dos por tres. Hoy te vamos a dar una serie de trucos para que la vida sea más fácil.

Y es que en todas las cuentas personales que tengamos por Internet nos van a pedir contraseña. Algunas veces nos podemos acordar porque es sencilla. Sin embargo, en otras ocasiones ni recordamos ya que nos pidieron números, letras, dígitos e incluso un número determinado de caracteres. Normal que se nos olvide y tengamos que cambiarla.

La contraseña

La contraseña

Vivimos en un mundo en el que estamos controlados por las contraseñas. En redes sociales, en las tarjetas de crédito, en los correos electrónicos, para abrir la sesión del ordenador…Una contraseña o clave es una forma de autentificación que utiliza información secreta para controlar el acceso hacia algún recurso.

La contraseña debe mantenerse en secreto ante aquellos a quien no se les permite el acceso. Sin embargo, no siempre es así. Dada la complejidad de memorizar, lo que hacemos es poner números fáciles o sencillos, y eso favorece el trabajo de los piratas informáticos, los famosos hackers. En la lengua inglesa se tienen dos denominaciones distintivas para las contraseñas: password (palabra de acceso) y pass code (código de acceso).

Procedimientos para cambiar las contraseñas

Procedimientos para cambiar las contraseñas

Cuando nos olvidamos de una contraseña, hay que cambiarla. Los Sistemas de Administración de Identidad se utilizan cada vez más para automatizar la emisión de reemplazos para contraseñas perdidas. La identidad del usuario se verifica al realizar algunas preguntas y compararlas con las que se tienen almacenadas.

Algunas preguntas típicas incluyen las siguientes: «¿Dónde naciste?», «¿Cuál es tu película favorita?», «¿Cuál es el nombre de tu mascota?» En muchos casos las respuestas a estas preguntas pueden ser adivinadas, determinadas con un poco de investigación, u obtenidas a través de estafa con ingeniería social. Mientras que muchos usuarios han sido advertidos para que nunca revelen su contraseña, muy pocos consideran el nombre de su película favorita para requerir este tipo de seguridad. Por eso, te vamos a dar una serie de consejos para elegir la mejor contraseña.

Longevidad de una contraseña

Longevidad de una contraseña

La mejor recomendación es que cambies la contraseña cada cierto tiempo, pero claro, como has visto tenemos un montón de contraseñas que cambiar. Esto nos puede llevar un buen rato en toda la semana. Y la verdad, ahora mismo el tiempo no nos sobra. Además, forzar cambios de contraseña frecuentemente hace que los usuarios tiendan a olvidar cual es la contraseña actual.

Por este motivo, te da la consecuente tentación de escribir las claves en lugares a la vista o que reutilicen contraseñas anteriores, lo cual niega cualquier beneficio de seguridad. Al implementar este tipo de política se requiere una cuidadosa consideración de los factores humanos.

Elegir buena contraseña y mantenerla

Elegir buena contraseña y mantenerla

Está claro que hay muchos trucos para elegir una buena contraseña. Pero no siempre la más compleja es la mejor. Entre otras cosas porque se te puede olvidar. Por este motivo lo que queremos es ofrecerte unos consejos para elegir una buena contraseña…pero que la mantengas durante mucho tiempo.

El tiempo ha pasado muy rápido y como pasa en todas las cosas, existe la relatividad. ¿Qué es seguro y qué no? Siempre nos han dicho que lo mejor es componer una clave formada por letras mayúsculas, números, símbolos y de cierta longitud. Dicen que con 12 como mínimo. Pero claro, esto lo que dificulta es que te la aprendas de memoria.

Una compleja o varias fáciles

Una compleja o varias fáciles

Esa es otra de las grandes preguntas. Algunos usuarios de Internet lo que prefieren es crear contraseñas que sean poco complejas. Y lo hacen uniendo palabras sin relación entre sí y que terminan conformando contraseñas más largas difíciles de adivinar por fuerza bruta. Es otra buena opción.

Y luego está la otra opción. El usuario usa la misma contraseña en varios sitios. Pero esto ya te decimos que es muy poco recomendable y que compromete varias cuentas de una vez si esta contraseña cayese en manos de los delincuentes. Es decir, que una no te puede importar porque se trata de una página sin importancia, pero si es la misma que el banco o que las redes sociales, el lío puede ser muy gordo.

Las contraseñas largas son mejores que las complejas

Las contraseñas largas son mejores que las complejas

Los expertos recomiendan que las contraseñas largas son mejores que las complejas. Especialmente si la clave corta es compleja, ya que un ordenador tardará menos en descifrarla. De lo que tienes que huir es de las de toda la vida. Es decir, “1234”, la fecha de nacimiento o el nombre de nuestra madre. A la que queremos mucho pero que no es segura para Internet.

La frase no debe ser demasiado corta o evidente, ya que los piratas informáticos cuentan con herramientas para detectarlas. Lo que te recomendamos es que el usuario puede aprovecharla para introducir en ella los distintos elementos que la convertirán en una contraseña robusta. Por ejemplo, “contraseñasseguras” se puede convertir en ‘c0ntr@s3ñ@ss3guras’.

Consejos para la contraseña segura

Consejos para la contraseña segura

Vamos con algunos de los ejemplos que ponen los expertos. Dicen que la mejor forma de crear una contraseña segura que evite tener problemas con los piratas es emplear un sistema que te permita recordarla pero que sea robusta. Por ejemplo un sistema perfectamente válido es asociar año + evento importante. Por ejemplo, 2010MiBoda o 2020Coronavirus”.

Como ves, se juega con los números, eventos y también mayúsculas y minúsculas. Y los acontecimientos son lo suficientemente importantes como para recordarlos. ¿No es así?

Otros ejemplos

Otros ejemplos de contraseñas

Para terminar, te vamos a dar más ejemplos que proporcionan los expertos. Hay que usar frases en lugar de password. Es decir, una de ellas puede ser una cita de un libro, o algo de tu vida. Por ejemplo, “MellamoJesusYvivoenValladoliddesde2010”. “EnUnLugarDeLaMancha”. ¿Qué te parecen estos casos?

Está claro que la mejor clave para ser recordada, es la de usar el sentido común. Eso, y tener una agenda secreta siempre a  mano.