La izquierda madrileña está de enhorabuena. El confinamiento de los barrios y municipios del sur se ha convertido en el arma arrojadiza perfecta para lanzar a las coaliciones de PP y Ciudadanos que gobiernan tanto el Ayuntamiento como la Comunidad de Madrid. No se han conformado con dejar caer en los medios la idea de que se han impuesto medidas restrictivas para paliar la pandemia con motivaciones ideológicas y no sanitarias, sino que han puesto a trabajar a todo su equipo de márketing para elaborar carteles, imágenes para las redes sociales y todo tipo de vídeos para denunciar que el Gobierno autonómico y el Consistorio han convertido los barrios del sur en «guetos». Agua de mayo ha sido este anuncio de nuevas restricciones para la izquierda.
Rita Maestre, la concejal de Más Madrid, se ha puesto manos a la obra en las redes sociales. Ya se comparten imágenes de los cuatro políticos clave que gobiernan tanto el Ayuntamiento como la Comunidad con los ojos tachados en los que se exige su dimisión por haber «confinado» los barrios del sur. «Los barrios contra el confinamiento segregador. Más sanitarios, más profesores, más rastreadores. #DignidadDelSur», ha asegurado Maestre. Desde la Comunidad insisten en que solo se han seguido criterios sanitarios para imponer las restricciones, de hecho, insisten en que no tendría sentido haber cometido la torpeza de haberlo hecho de otra manera por varios motivos, desde el económico hasta el ideológico.
Aún así, Rita se apunta a un bombardeo, al igual que Íñigo Errejón, líder de Más País, cuyo compromiso con la Comunidad de Madrid duró unos pocos meses, hasta que pudo dar el salto al Congreso. Y ahora ambos se han convertido en los acérrimos defensores de los barrios y municipios del sur. La estrategia política ha sido clara: intentar vender como clasista una decisión que solo está apoyada en criterios sanitarios, nada más.
Aún así, y a pesar de que Errejón, por ejemplo, vive cerca de Ópera, en Madrid Centro, la izquierda ha visto una oportunidad de oro en la nueva decisión de la Comunidad de Madrid. Es una postura dura, pero necesaria. Sin embargo, no hay que perder la oportunidad de hacer desgaste incluso con imágenes bien elaboradas. La candidata de Podemos en la Comunidad, Isabel Serra, también se ha apuntado al bombardeo para desgastar a los gobierno vigentes.
Con el hashtag #DignidadSur, todos se han puesto manos a la obra para arañar un puñado de votos de estos barrios. «¡Por la dignidad del sur! !Por la salud de tod@s!», comenta Isa Serra.»¿Os acordáis de cuando Vox llamó estercoleros a los barrios del Sur? Hoy la Presidenta les supera», ha preguntado Eduardo Rubiño, senador de Más Madrid. Y así en cualquier rincón de la oposición madrileña.
El PSOE mantiene una línea más moderada, basada en fomentar una estable moción de censura. Pero el candidato socialista a la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo, no parece que quiera hacerlo a cualquier precio ni sumarse a una campaña política de desgaste que no tiene una base palpable. “No quiero cualquier Gobierno de cualquier manera y a cualquier precio”, ha asegurado Gabilondo este lunes.
La mayoría de los representantes de izquierda que se han erigido para defender la «dignidad» del sur no viven en barrios confinados. Tampoco es que se haya impuesto un confinamiento al uso, tal y como se vende desde los partidos más a la izquierda en el elenco parlamentario madrileño. Son restricciones puntuales en municipios y barrios concretos que buscan contener los contagios. Pero si hay que reunirse con los vecinos de estos sitios para luego hacer campaña, se hace.