La Coca-Cola Zero, que recientemente ha sido rebautizada como Coca-Cola Zero Sugar, se comercializa como una versión más saludable de la bebida original endulzada con azúcar, la clásica Coca-Cola. Una opción, en teoría, más sana ya que no contiene ni calorías y azúcar y que además, mantiene el sabor íntegro de la Coca-Cola convencional.
Pero, ¿realmente es así? es decir, ¿seguro que es buena? Puede que mantenga ese sabor caracterísitico de la clásica Coca-Cola, lo que a priori, la convierte en una bebida muy atractiva para quienes intentan reducir su consumo de azúcar o controlar su peso. Sin embargo, vamos a pasar a detallar sus pros y sus contras, y todo lo que no te han contado de la Coca-Cola Zero.
Coca-Cola Zero, plagada de edulcorantes artificiales
La Coca-Cola Zero utiliza varios edulcorantes artificiales comunes, incluidos el aspartamo y el acesulfame de potasio (Ace-K). Los ingredientes restantes son agua carbonatada, color caramelo, aditivos alimentarios y sabores naturales. Las únicas diferencias entre la Coca- Cola Zero y la Coca-Cola son cambios menores en la composición del sabor natural. Según los resultados del estudio de Harvard sobre la pérdida de peso son mixtos, y encontró que las personas que bebían más de 21 bebidas endulzadas artificialmente por semana casi duplicaban su riesgo de sobrepeso y obesidad, en comparación con las personas que no consumían este tipo de bebidas.
