Gran Hermano: historias de amor que acabaron como el rosario de la aurora

A lo largo de toda la historia de Gran Hermano, el reality más popular de Telecinco, ha ido surgiendo el amor entre las paredes de la casa de Guadalix de la Sierra. Sin embargo, muchas de las historias fraguadas en ella no acabaron demasiado bien.

En un año en el que la pandemia sanitaria del coronavirus ha provocado la ausencia del concurso, repasamos las historias de amor que acabaron como el rosario de la aurora, con los protagonistas inmersos en discusiones en los platós de televisión.

PAULA Y OMAR, DEL AMOR A LOS REPROCHES

PAULA Y AMOR, DEL AMOR A LOS REPROCHES

En 2014, surgió el amor entre Omar y Paula en el interior de la casa de Gran Hermano. Rápidamente ambos se gustaron y en muy poco tiempo ya eran pareja en la casa. Sin embargo, su relación apenas duró unas semanas.

Omar había dejado su relación anterior muy poco tiempo atrás y la dirección del reality decidió meter a su expareja, Lucía en la casa de Guadalix. Esto hizo que pocas horas después de su llegada se reconciliasen. Esto provocó la existencia de un triángulo amoroso que dio mucho que hablar por las constantes discusiones entre ellos. Estas se prolongaron más allá del propio concurso.