El Pleno del Congreso ha rechazado este jueves una moción de Vox por la que se reclamaba la reprobación y destitución de los ministros del Interior y de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Fernando Grande-Marlaska y José Luis Escrivá, respectivamente, por sus políticas migratorias.
La iniciativa ha contado con los únicos votos a favor de los 52 diputados con los que cuenta la formación de Santiago Abascal en la Cámara baja.
El texto defendido por Vox, pedía, además, suspender la expedición o concesión de visados de entrada en Europa «a todos los ciudadanos de países emisores de inmigración irregular, como Argelia, Marruecos o Mauritania», y a pedir a Europa que los sancione económicamente, mientras «no readmitan en sus fronteras a todos los inmigrantes irregulares que dejan salir de sus costas en dirección a España».
Del mismo modo, llamaba al Gobierno a denunciar ante los organismos internacionales la agresión que sufre España por parte de los estados del norte de África «al no controlar el tráfico irregular de personas dirigidas a sus costas.
DECLARAR LA CRISIS COMO SITUACIÓN DE INTERÉS
La iniciativa, recogía también la necesidad de «declarar la crisis migratoria como situación de interés para la Seguridad Nacional», con el objetivo de que se puedan desplegar «todos los recursos humanos y materiales necesarios y suficientes en aras de prevenir, proteger y disuadir el atraque de embarcaciones con inmigrantes ilegales en territorio nacional».
Vox también proponía llevar a cabo una operación de vigilancia y monitorización de los flujos migratorios, tanto en las costas españolas como en las costas de salida de las embarcaciones que, presuntamente, puedan transportar inmigrantes ilegales.
En caso de que se intercepte una embarcación de estas características, recogía la moción, «se brindará la asistencia urgente que fuera necesaria y se procederá a devolver a sus inmigrantes a un puerto seguro en costas africanas».
