El director mexicano Michel Franco ha presentado en España ‘Nuevo orden’, una película que refleja las desigualdades sociales en México, donde una inesperada revuelta social da paso a un violento golpe de estado. La cinta fue galardonada con el Leoncio d’Oro en el último festival de Venecia y que se estrena en cines el 19 de febrero.
En este contexto, Franco ha afirmado en una entrevista que «sin duda» el expresidente de Estados Unidos Dondald Trump incitó al asalto al Capitolio. «En el asalto al Capitolio vimos cómo la gente copia lo que escucha», ha precisado.
Aunque Trump ha sido absuelto en el juicio político por el delito de incitación a la insurrección en el asalto al Capitolio del 6 de enero, el cineasta mexicano considera que «la gente se sintió envalentonada por las cosas que de manera irresponsable dijo» el expresidente estadounidense durante muchos años.
«A los mexicanos nos calificó en muchas ocasiones como violadores. Vale la pena que lo valoremos y que aprendamos, porque el error frecuente es no aprender de la historia y esta historia es tan reciente que no hemos pasado la página todavía. Aunque ya no está, Trump deja una huella y no hemos visto lo peor», ha advertido.
El asalto al Capitolio, según ha señalado Franco, sorprendió al mundo porque «nadie se imaginaba» esas escenas que, a su juicio, «son un reflejo de la descomposición y de la falta de credibilidad en los políticos». «El terrible tiempo que pasó Estados Unidos con Trump trajo esa consecuencia», ha dicho.
El cineasta espera que con Joe Biden en la Casa Blanca «las cosas mejoren y se vuelva al civismo, a algo más justo, menos agresivo». «Trump no paró de insultar a los mexicanos y de meterse con todo el mundo. Tampoco podemos olvidar Black Lives Matter, donde por un buen motivo la gente sale a protestar a las calles y el ejército y otras fuerzas policiales salieron a reprimir y eso mostró que en Estados Unidos, un país supuestamente democrático, hay muchas fuerzas oscuras», ha criticado.
Franco ha destacado la importancia de que la gente «salga a la calle» porque «ya nadie cree en los políticos» ya que «no hacen lo que les corresponde». «Cuando tampoco son escuchados pues suben un escalón como lo han hecho los chalecos amarillos, como ha sucedido en Chile y en muchos países. La violencia empieza a escalar y la gente no para hasta que es escuchada», ha alertado.
‘NUEVO ORDEN’, UNA ALERTA PARA NO LLEGAR AL «ESTALLIDO VIOLENTO»
Sin embargo, el director ha apostillado que tiene «fe» en que se puede generar un cambio sin llegar a la violencia y ha explicado que su película ‘Nuevo orden’ es una «especie de alerta» para no llegar al «estallido violento».
La nueva cinta de Franco plantea el día en que un país estalla por la desigualdad social y hace una radiografía de ese país a gran escala a partir de ocho puntos de vista, con el objetivo de que el espectador «se ponga en los zapatos» de estos ocho personajes principales.
La película empieza con una boda, en el núcleo de una familia de clase privilegiada en Ciudad de México, que se lleva a cabo a pesar de que el país está a punto de «estallar» en conflictos sociales. «Como viven en una burbuja a ellos solo les importan sus festejos y utilizar la boda para sus negocios de corrupción», ha dicho Franco.
Para el director, la desigualdad social «es el gran mal del mundo» y sucede «en todos los lugares», aunque especialmente en México, donde hay «120 millones de personas y 60 millones son pobres que viven sin lo mínimo necesario para tener bienestar».
A su juicio, esta desigualdad es algo «sumamente injusto» que sin embargo «se ha normalizado, se ha justificado» y la gente se ha «acostumbrado a ello». «Mi película dice que el status quo está mal, esto es inaceptable y si no lo cambiamos de buena manera el cambio va a llegar de manera violenta», ha concretado.
‘Nuevo orden’, según ha explicado Franco, es una película «muy ágil que te agarra desde que empieza, desde la primera imagen que es impactante, y nunca para, nunca hay respiro». «Creo que lo que más llama la atención es que es un espejo en el que las sociedades de todo el mundo se ven reflejadas. Muchas veces no nos gusta lo que vemos en ese espejo», ha afirmado.
ESCENAS IMPACTANTES PARA «SACUDIR» AL ESPECTADOR
El largometraje contiene varias escenas impactantes con las que el director busca «sacudir» al espectador y que se siente «confrontado» y «cuestionado». «No hay buenos y malos, un mismo personaje en el minuto 10 puede comportarse de mala manera y en la segunda parte de la película hacer una buena acción y luego acabar otra vez mal. Son personajes tridimensionales que reflejan el lado humano que todos tenemos y que es complejo», ha dicho Franco.
No obstante, el director cree que «no es una experiencia para el espectador demasiado dura, porque nada de lo que sucede ya ha sucedido», aunque ha matizado que, con la situación actual provocada por la pandemia, la historia «termina siendo muy cercana a la realidad». «Es como cuando ves un accidente y no puedes evitar mirar y observar», ha apuntado.
La desigualdad social, uno de los temas centrales de ‘Nuevo orden’, según ha afirmado Franco, «sin duda» se está incrementando debido a la Covid-19. «La pandemia hubiera sido una gran oportunidad para solidarizarnos y sentir empatía por el que menos tiene y sin embargo los ciudadanos están en una actitud de sálvese quien pueda y nos vamos a hundir todos», ha lamentado.
Al ser preguntado por el auge de las plataformas online, el cineasta mexicano se ha posicionado como «fiel creyente de que el cine se ve en el cine» y indicado que el streaming «como segunda ventana está muy bien» y que él ve «muchas películas en casa, sobre todo cine viejo».
«Pero no podemos eliminar la sala de cine, para eso trabajo durante muchos años preparando una película, editando, haciendo el sonido y eso jamás se va a suplir con una experiencia en casa. Yo hago cine, no televisión», ha sentenciado.
En este punto, Franco ha destacado que las salas de cine «siempre van a estar» aunque con la pandemia «muchas van a cerrar y tal vez nunca vuelvan a abrir». Por ello, ha indicado que es «importante» el apoyo de los gobiernos.
Hay países como Francia que tradicionalmente han mantenido las salas de cine de barrio, las pequeñas, hay apoyo a la cultura. El cine es parte de nuestra identidad y si no luchamos por que las salas de cine existan vamos a perder parte de esa identidad», ha concluido.