El pisto es ese sabroso plato tan bonito como sabroso. ¿Por qué es bonito? pues bien, nos atraveríamos a decir que es el más hermoso por ser uno de los más coloridos y apetecibles a la vista. Un exquisito plato lleno de verduras de colores, que se sirve sobre pan tostado y se remata con un huevo frito. Rico, ¿verdad? Una comida que se prepara en un santiamén, y que se puede tomar en frío o caliente.
Pero hoy, vamos a desvelar una forma de hacerlo de lo más especial. Al más puro estilo ensalada, os vamos a desvelar como hacer un pisto rápido, fresco y que encima adelgace. Sí, has leído bien. Porque el pisto también adelgaza, así es como se prepara ¡Toma nota!
4El toque de las especias para el pisto Manchego
Agregamos todas las especias al tazón de verduras y mezclamos bien.
Luego, ponemos un poco más de aceite a una de las cacerolas si es necesario, y agregamos el ajo cortado en cubitos. Sofreímos a fuego medio hasta que empiece a freír. Luego, agregamos el tomate pelado y cortado en cubitos a la sartén. Cocinamos a fuego medio bajo durante unos 20 minutos, revolviendo con frecuencia, hasta que aparezca como salsa de tomate. Agregamos una pizquita de azúcar y de sal.