El PP y Vox van a aprovechar el Pleno del Congreso de este miércoles para pedir cuentas al ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, por la polémica desatada a raíz del asesinato de un niño de nueve años en Lardero (La Rioja) por parte de un preso al que se le había concedido el tercer grado, previo a la libertad condicional, en contra del criterio de la Junta de Tratamiento de la prisión.
En concreto, han presentado sendas preguntas para el ministro, pero también dos interpelaciones sobre la política penitenciaria del Gobierno que les valdrán para someter a votación en la siguiente sesión plenaria sendas mociones sobre este asunto, según han informado a Europa Press fuentes parlamentarias.
Así, el diputado ‘popular’ Javier Merino quiere que Marlaska le aclare qué responsabilidad va a asumir por la concesión del tercer grado al asesino del menor por parte de Instituciones Penitenciarias, en contra del criterio defendido por la Junta de Tratamiento de la cárcel.
En la misma línea, el vicepresidente cuarto de la Mesa del Congreso, Ignacio Gil Lázaro, aspira a que el ministro le confiese si se considera «responsable político» de las «decisiones inadecuadas» de Instituciones Penitenciarias respecto a la concesión de ese grado al presunto autor del crimen de Lardero.
Tras las preguntas, se debatirán las dos interpelaciones de estos grupos, en ambos casos destinadas a que el ministro dé cuenta de su política penitenciaria.
ENDURECER LA PRISIÓN PERMANENTE REVISABLE
En esos debates, PP y Vox también podrán sacar a colación la política respecto a los presos de ETA y reiterar sus críticas al Gobierno, al que acusan de haber logrado el apoyo de Bildu al primer trámite de los Presupuestos a cambio de la futura liberación de presos de la banda terrorista.
Estos asuntos volverán también a la siguiente sesión plenaria, cuando los ‘populares’ y los de Santiago Abascal sometan a votación las correspondientes mociones derivadas de las interpelaciones y fuercen a retratarse a todos los grupos sobre sus propuestas en esta materia.
Tras el asesinato de Lardero, el presidente del PP, Pablo Casado, defendió la prisión permanente revisable para evitar la reincidencia de este tipo de presos, mientras que desde Vox se ha anunciado la intención de plantear una revisión de esta figura para endurecerla.