Los líderes de la UE aprovecharán su cumbre de este miércoles con los países de la Asociación Oriental en Bruselas para lanzar un mensaje contundente y mostrar su unidad frente a Rusia, en pleno pulso por el despliegue militar ruso en la frontera, lo que ha generado alerta sobre una posible agresión a Ucrania.
Esta será la sexta cumbre que la UE mantiene con los países vecinos del este y en ella participarán los mandatarios de Armenia, Azerbaiyán, Georgia, Moldavia y Ucrania y con ella se buscará reafirmar el compromiso con la estabilidad de esta región, así como el deseo de que siga avanzando en las reformas necesarias, para lo cual los Veintisiete están dispuestos a contribuir con fondos.
La situación en Ucrania será uno de los temas principales que se aborden en el encuentro, ya que en las últimas semanas Rusia ha venido concentrando en la frontera ucraniana miles de soldados, generando el temor de que se dispone a invadir nuevamente el territorio, después de que en 2014 ya se anexionara Crimea.
Los estados miembros han dejado claro que no se aceptará ninguna agresión contra la integridad y la soberanía de Ucrania y han advertido de que no se quedarán de brazos cruzados si esto ocurre, pero por el momento confían en no tener que adoptar medidas de represalia contra Rusia.
Así al menos lo ha expresado el Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, quien ante la Eurocámara ha asegurado este martes que «en este momento, esperamos lo mejor, pero estamos preparados para lo peor».
«Si se deteriora la situación, no tengan dudas de que estaremos listos para responder», ha recalcado, si bien ha precisado que por ahora los Veintisiete están centrados en no contribuir a la escalada de las tensiones, algo que podría usar Rusia para justificar una acción, por lo que ha defendido un enfoque diplomático para disuadir cualquier posible agresión rusa.
MENSAJE A RUSIA
Los líderes europeos abundarán en este mensaje en las conclusiones que saldrán de la cumbre, con un claro mensaje dirigido hacia Rusia no solo por su actuación en lo relativo a Ucrania, sino también por sus esfuerzos de desestabilización en general en esta región, lo cual supone una amenaza para la seguridad y la estabilidad en Europa.
Asimismo, recalcarán que estos países, que en su día estuvieron bajo la órbita soviética, tienen «derecho soberano» a decidir su futuro y su relación con la UE y que la Asociación Oriental lo que busca no es otra cosa que contribuir a la paz y la prosperidad de todos estos países y no ir en contra de Moscú.
Otro de los temas que abordarán los líderes europeos y sus socios del este será la situación en Bielorrusia y más en concreto el uso que este país ha hecho de la inmigración irregular para presionar a la UE, con la llegada masiva de migrantes a las fronteras de Polonia, Letonia y Lituania.
Bielorrusia, que también forma parte de la Asociación Oriental, no estará presente en la cumbre dado que el país está suspendido tras las elecciones de 2020 en las que el presidente, Alexander Lukashenko, fue reelegido para su sexto mandato y que los Veintisiete no reconocieron.
ESTRENO DE CUATRO MANDATARIOS
La de este miércoles será la primera cumbre europea para cuatro nuevos mandatarios. Así, se estrenarán el nuevo canciller alemán, Olaf Scholz, la nueva primera ministra sueca, Magdalena Andersson, el nuevo primer ministro búlgaro, Kiril Petkov, y su nuevo homólogo de Austria, Karl Nehammer.
Los líderes europeos volverán a reunirse el jueves, ya en solitario, en una cumbre centrada en cómo seguir impulsando la vacunación frente al repunte de contagios por coronavirus en muchos estados miembro y otras claves de la pandemia, como el debate sobre si deben reforzarse las restricciones de viaje de cara a los desplazamientos que se esperan durante las vacaciones.