Cómo hacer unos gofres caseros que no engordan ni un gramo

El gofre o waffle es un pastel de masa ligera cada vez más popular para desayunos o meriendas. Han comenzado a abundar incluso las gofrerías por los centros comerciales de las ciudades o las principales calles. Lo mejor de todo es que se acompaña de lo que quieras: de frutas, crema, jarabe…, o puedes hacer gofres salados con patatas.

Pero lo mejor como siempre es tomarlo casero, y de paso deleitar a la familia. Hay mi maneras de prepararlos: solos con miel, con maple, con chocolate, combinados con mermeladas, con chocolate y fresas, con chocolate y cambur, con crema o nata si la tienes en casa, simples con canela, con crema de café, en pasteles apilados para comer con cuchillo y tenedor, pero también los puedes hacer salados, con mezclas muy interesantes, así que anímate, sólo tienes que ponerle un poco de imaginación. Te contamos cómo hacerlos y además de la manera más sana posible.

6
HACER GOFRES SIN GOFRERA

Gofres en casa

Para ello tendrás que usar tu sartén a fuego medio y una parrilla. Unta un poco de mantequilla derretida por toda la superficie de la sartén. La parrilla estará lista para la masa, tan pronto como la mantequilla comience a chisporrotear, y verter la masa en la bandeja para asar. Para lograr un gofre crujiente por fuera y esponjoso por dentro, baja el fuego de la sartén de la parrilla de medio a bajo. Continúa asando a la parrilla hasta que el fondo y los bordes del gofre se vean crujientes o incluso ligeramente dorados. Una vez que eso suceda, con la espátula, voltea el gofre y asa por el otro lado hasta que el fondo esté lo suficientemente crujiente.