Condenan a 16 años de prisión a un hombre que traía mujeres venezolanas a España para prostituirlas

Un hombre fue condenado a 16 años y 10 meses de prisión por haber traído desde Venezuela a un grupo de mujeres que fueron explotadas sexualmente, durante varios años, en un bar que era propiedad del sentenciado. Esto ocurrió en la localidad de Salamanca, en la Comunidad de Castilla y León.

De acuerdo con la información publicada por el Tribunal Superior de Justica de esta comunidad del norte de España, esta persona, junto a otra que todavía no ha podido ser extraditada a España, viajaban a Venezuela con la intención de captar allá mujeres, a quienes se les decía que vendrían a trabajar como prostitutas en España, valiéndose de las condiciones de pobreza en las que estas mujeres vivían en su país.

En principio las contrataban como prostitutas en Venezuela, para verificar que al llegar a España servirían para ejercer este trabajo. Posteriormente las trasladaban a España, donde ingresaban como turistas y las mantuvieron trabajando en un bar por casi cuatro años, sometidas, mediante amenaza, diciéndoles que tenían muchos contactos que podían hacerles daño a ellas y a sus familiares en el país caribeño.

Las autoridades judiciales ordenaron al condenado que indemnizara a cada una de sus víctima con 15 mil euros, así como el cierre definitivo del local donde mantenía trabajando a las chicas. Además, tendrá que asumir todos los gastos del costo del proceso judicial y una vez que quede en libertad no podrá acercarse a las víctimas a una distancia menos de 250 metros, cerca de sus casas o de sus lugares de trabajo.

De acuerdo con las investigaciones llevadas a cabo por las autoridades españolas, estas mujeres eran amenazadas por las personas que las obligaban a ejercer la prostitución en el país, con que si acudían a la policía a denunciar todo lo que ocurría, los cuerpos de seguridad españoles las iban a detener por ejercer la prostitución y posteriormente las enviarían de vuelta a Venezuela.

Esta persona que fue sentenciada a 16 años de prisión ya tenía antecedentes penales. no de los delitos que le habían imputado las autoridades era el de blanqueo de capitales, pero que fue desestimado en el momento de establecer la pena que deberá cumplir. La Audiencia hizo énfasis en la responsabilidad del sentenciado al momento de valerse de las condiciones de pobreza en la que vivían las víctimas en Venezuela, para su captación, con la promesa de una mejor calidad de vida en España, y sobre todo de la oportunidad de valerse de la precariedad en la que vivían aquí en el país y el desconocimiento de las leyes para mantenerlas sometidas durante tantos años, obligándolas a ejercer la prostitución.

Una práctica que se ha vuelto común

La situación sociopolítica y económica de Venezuela ha hecho que proliferen este tipo de mafias que se encargan de sacar del país a jóvenes pobres, ofreciéndoles supuestas oportunidades laborales con ofertas económicas muy por encima de las posibilidades que ellas podrían tener en el país caribeño.

La manera de actuar de estas mafias consiste en viajar hasta ese país y ofrecerles información sobre los mecanismos para solicitar la protección internacional (asilo) y prometiéndoles que de esta manera podrían vivir legalmente en España.

Sin embargo, España se ha convertido en la puerta de entrada al continente de mujeres que son víctimas de mafias dedicadas al tráfico de personas que son captadas en Venezuela, donde la pobreza ocasionada por la dictadura de las dos últimas décadas las empuja a querer salir del país en busca de mejores oportunidades.

Por lo general, estas mujeres son víctimas de explotación sexual en locales o en apartamentos de ocasión, donde son sometidas a diversos tipos de amenazas para que ejerzan la prostitución, mientras el dinero que perciben es completamente manejado por las personas que las esclavizan.

En algunas oportunidades son captadas con ofertas de trabajo engañosas en las que les ofrecen que serán convertidas en modelo o azafatas de marcas de gran prestigio, y una vez que son traídas a España son sometidas a tratos crueles y degradantes, sin contar que además existen mafias que después de traerlas a Europa, comienzan a venderlas a otras mafias de países de la Unión Europea o Asia, donde las mujeres de origen latino son buscads para el mercado de la prostitución.