El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha pedido este miércoles a la ANC dirigir su presión al Estado en lugar de hacerla «como reproches a compañeros de viaje» del movimiento independentista.
Lo ha dicho en una entrevista de TV3 recogida por Europa Press, después de que haya decidido no asistir a la manifestación convocada por la ANC con motivo de la Diada de este domingo porque considera que está planteada contra los partidos y el Govern.
Aragonès ha lamentado que la convocatoria de la manifestación de la ANC sea crítica con el Govern, por lo que cree que «no tendría sentido» asistir a una movilización dirigida contra el Ejecutivo que preside.
El presidente catalán ha insistido en que el independentismo debería actuar en positivo y respetando la transversalidad del movimiento, ya que, a su juicio, es la manera en la que se ha avanzado hasta ahora.
«El independentismo debemos recordar cuándo hemos sido capaces de avanzar: cuando partimos de la pluralidad y la transversalidad, hemos dado la bienvenida a todo el mundo, hemos trabajado en positivo y hemos trabajado para sumar y para dejar los reproches atrás», ha defendido.
Preguntado por si ERC está hablando con la ANC para cambiar el enfoque de la manifestación, ha contestado que no pedirá a una entidad que modifique el sentido de sus actos, aunque le gustaría que fueran lo más inclusivos posibles y que se dirigieran hacia el Estado en vez de criticar al resto de independentistas: «Me gustaría que esta fuera la presión«.
Después de que se haya anunciado que ningún conseller de ERC irá a la manifestación mientras que todos los de Junts asistirán, Aragonès ha argumentado que se debe «entender como natural, forma parte de la transversalidad del independentismo», y ha señalado que en la Diada hay muchos más actos en los que tanto él como los miembros republicanos del Ejecutivo participarán.
Ante el debate sobre si Junts saldrá del Govern, Aragonès ha recalcado la necesidad de que el Ejecutivo se centre en gobernar el día a día, especialmente en el contexto económico y social actual.
«En estos momentos lo que la ciudadanía nos pide es que todo el mundo siga asumiendo sus responsabilidades más allá de los matices o las divergencias que puedan haber sobre cómo conseguimos la independencia. En muchos otros ámbitos tenemos que seguir trabajando, tenemos que estar al pie del cañón», ha reiterado.
De esta manera, ha dicho que no entendería que en este momento alguien decidiera no asumir sus responsabilidades de gobierno, por lo que «está convencido» de que esto no ocurrirá y que Junts continuará en el Ejecutivo.
Aragonès ha subrayado que habrá debate entre los partidos para ponerse de acuerdo en aquello que discrepan, pero ha insistido en que las «instituciones se tienen que preservar».
Sobre los Presupuestos de la Generalitat para 2023, Aragonès ha mantenido que sus socios prioritarios son la CUP y los comuns, y, pese a que los ‘cupaires’ han descartado negociar las cuentas, ha dicho que seguirán insistiendo: «Me gustaría que pudieran participar».
Preguntado por si descarta al PSC como socio en los Presupuestos, el presidente ha replicado que tiene un «modelo de país» diferente al de los socialistas, de manera que prioriza a las formaciones con las que coincida más.