Todos (los que podemos) sabemos caminar, porque es un instinto natural del ser humano. Con unos pocos meses de vida nos ponemos de pie y comenzamos a dar nuestros primeros pasos. Pero, ¿y si nos dijeran que no todos caminamos correctamente o que podemos andar de una forma específica para sacarle partido a cada paso? De esto se trata la marcha nórdica, una disciplina deportiva que cada vez gana más adeptos por los grandes beneficios que aporta y lo accesible que es para todo el mundo. Caminar puede ser mucho más que avanzar poniendo un pie delante del otro.
6MEJORA LA CIRCULACIÓN Y FORTALECE EL CORAZÓN

Como cualquier ejercicio aeróbico, este tipo de marcha con bastones, obliga al corazón a bombear con más fuerza y aumenta el retorno de la sangre al corazón. Con el tiempo mejora el ritmo cardiaco, aumenta la capacidad pulmonar, disminuye la presión arterial y mejora la circulación.