Cada vez hay más gente que resulta ser intolerante a la lactosa. Hace décadas esto era prácticamente imprescindible. Pero ¿Qué es la intolerancia a la lactosa? ¿Quiénes la padecen? ¿Es algo grave que penaliza nuestra vida cotidiana? ¿Se trata de una moda de la nueva nutrición? Destripamos todo sobre la intolerancia a la lactosa
3Más allá de la leche: El proceso de fabricación de productos sin lactosa para intolerantes a la lactosa
En un mundo donde la intolerancia a la lactosa es común, la demanda de productos sin lactosa está en auge. Pero, ¿te has preguntado nunca cómo se fabrican estos productos? ¿Cómo se pueden eliminar la lactosa de los productos lácteos sin alterar su sabor o textura?
Aquí vamos a explorar exactamente cómo se fabrican los productos sin lactosa, para que aquellos que son intolerantes a la lactosa puedan seguir disfrutando de alimentos lácteos sin temor a las repercusiones de la salud.
Primero, repasemos rápidamente qué es exactamente la lactosa. La lactosa es un tipo de azúcar que se encuentra de forma natural en la leche de todos los mamíferos, incluyendo los humanos. Es la lactosa la que le da a la leche su dulzura característica. Algunas personas son intolerantes a la lactosa porque sus cuerpos no producen suficiente lactasa, la enzima que descompone la lactosa en azúcares más simples que luego pueden ser absorbidos por el organismo.
La producción de productos sin lactosa se realiza generalmente de dos maneras:
- Hidrólisis de Lactosa: Esta es la técnica más comúnmente utilizada para la producción de productos sin lactosa. En este proceso, se añade la enzima lactasa al producto lácteo. Esta enzima descompone la lactosa en dos azúcares simples: glucosa y galactosa, que no producen los síntomas de la intolerancia a la lactosa. La lactasa se añade durante la etapa de procesamiento, después de la pasteurización pero antes de la homogeneización. Este proceso no altera de manera significativa el sabor, la textura o el valor nutricional del producto final.
- Filtración de la leche: Este método separa físicamente la lactosa de la leche mediante una serie de membranas de filtración. Esto resulta en un concentrado de proteínas y grasa de la leche sin lactosa, que luego se mezcla con los demás ingredientes para crear productos lácteos, como quesos y yogures, sin lactosa. Es un proceso más costoso y menos común que la hidrólisis de la lactosa.
Finalmente, es importante tener en cuenta que los productos designados como «bajos en lactosa» o «reducidos en lactosa» pueden haber pasado por uno de estos procesos, pero aún pueden contener cantidades pequeñas de lactosa. Los individuos con intolerancia a la lactosa severa o alergia a la leche deben leer cuidadosamente las etiquetas de los alimentos y posiblemente evitar estos productos.
En general, la producción de productos sin lactosa está haciendo posible que las personas con intolerancia a la lactosa disfruten de los alimentos lácteos sin los indeseables efectos secundarios. Aún así, siempre es aconsejable buscar el consejo de un profesional de la salud al decidir qué alimentos son seguros y saludables para consumir.
