La vuelta a la tienda física: un cambio en los hábitos de consumo
El comportamiento de los consumidores en cuanto a la elección de dónde y cómo adquieren sus productos ha experimentado un notable cambio, tal y como demuestran los datos del VIII Observatorio de Comercio Electrónico en Alimentación de Asedas. El porcentaje de españoles que destinan parte de su renta a la compra de productos de alimentación y gran consumo ha disminuido en un 14%, siendo especialmente llamativas las divergencias entre la compra física y la compra ‘online’.
El auge de la conducta de ahorro del consumidor
El análisis detallado de los patrones de gasto revela una clara tendencia hacia una ‘conducta de ahorro’ por parte de los consumidores. La frecuencia de compra ha aumentado en un 14,8% de media, siendo los consumidores habituales de tiendas físicas quienes lideran este incremento al realizar una media de 65 compras al año. Por otro lado, el gasto por carro ha descendido un 15,9% de media, con un descenso del 22% en el gasto total de los consumidores exclusivamente ‘onliners’ y un ligero incremento del 2% en los ‘offliners’.
El retorno a la tienda física como estrategia de ahorro
El informe ratifica la tendencia observada en el último año de retorno a la tienda física como método para controlar el presupuesto de compra. Este retorno no solo se fundamenta en cuestiones económicas, sino también en el valor que los consumidores otorgan a la proximidad y confianza que brinda el comercio tradicional. La preferencia por la compra ‘offline’ ha experimentado un incremento del 5% respecto al año anterior, mientras que la modalidad de compra mixta u omnicanal ha visto reducida su participación en un 5%. Por su parte, la compra exclusivamente ‘online’ se mantiene estable.
Cambios en los hábitos de consumo y estrategias de ahorro
El estudio revela varias estrategias de ahorro adoptadas por los consumidores en un contexto aún marcado por la crisis de costes y la inflación. Destaca el cambio de hábitos en la elección de productos frescos, siendo significativo el 19% de encuestados que ha sustituido carnes por otras de menor coste y el 30% que ha dejado de consumir pescados y mariscos. Asimismo, se observa un desplazamiento hacia la compra física en el sector de productos frescos, con un notable porcentaje de encuestados que ya no adquieren alimentos frescos o congelados a través de plataformas ‘online’.
Rotación en la elección de establecimientos y motivos de ahorro
La capacidad de elección que tienen los consumidores para seleccionar dónde comprar pone a prueba su fidelidad a un establecimiento en particular. En este sentido, el 27% de los consumidores reconoce haber cambiado de supermercado, mientras que un 60% opta por visitar varias tiendas actualmente. Los consumidores ‘offliners’ y aquellos que realizan una combinación de compras en línea y físicas buscan principalmente factores como el ahorro, la proximidad, el surtido, la calidad y la confianza.
Factores determinantes en la selección de canal de compra
Tras el período de compras intensivas por Internet motivadas por la pandemia, los consumidores regresan al entorno físico atraídos por motivos como el precio, la cercanía, el surtido, la calidad y la confianza que encuentran en las tiendas tradicionales. Es importante destacar que un 21% de los consumidores que han experimentado el comercio ‘online’ han decidido dejar de utilizar este canal o planean hacerlo en un futuro próximo.
Perspectivas futuras y desafíos del comercio electrónico en alimentación
A medida que la elección del canal de compra se convierte en un factor determinante para los consumidores, la conveniencia, calidad, precio y confianza emergen como los pilares sobre los que se sustentan las decisiones de compra. Es fundamental para las empresas adaptarse a estas nuevas tendencias y necesidades del consumidor, garantizando una experiencia de compra satisfactoria y alineada con sus expectativas y preferencias.






