El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano GarcĂa-Page, ha evitado polemizar al respecto de los episodios conocidos en distintos puntos del paĂs donde dirigentes polĂticos de varios partidos han sido vacunados contra el coronavirus pese a no encontrarse dentro de los primeros estamentos del protocolo, asegurando primero que «no es un drama» y entendiendo que en todos los casos que se van conociendo, incluidos los Ăşltimos en la RegiĂłn de Murcia, afectan a personas que «están en contacto con la cadena de contagio y de control».
En una entrevista con Tele 5, el lĂder del Ejecutivo ha admitido que se valorĂł al marcar el plan de prioridades en su regiĂłn para dar cabida tambiĂ©n a determinados gestores polĂticos en contacto con el virus, pero se desechĂł la idea automáticamente.
«En España casi tienes que pedir perdĂłn por dedicarte a la polĂtica y por eso nosotros seremos los Ăşltimos aunque nos tocara antes», ha señalado GarcĂa-Page.
Por ello, no quiere «estigmatizar» a aquellos polĂticos que se han vacunado. «No estoy para perder mucho tiempo en eso. Creo que la gente que se lo ha puesto está al frente del aparato sanitario».
Aunque en todo caso ha reiterado que no está defendiĂ©ndolo, ha pedido «ponerse en la piel de cada uno». «No conozco sus circunstancias, pero todos tendrĂamos un argumento para anticiparnos», ha afirmado.
En cuanto a la vacunación en la región, el plan previsto «se va a cumplir» sin improvisaciones. La región es «muy grande, con muchos núcleos rurales y con mucha gente mayor», pero con «mucho personal sanitario».
Ahora el ritmo «va muy bien» tal y como ha defendido GarcĂa-Page, en un contexto donde hay que recordar que las vacunas «no vienen todas de golpe».
«Estamos con cierto miedo en el cuerpo por el comportamiento de Pfizer de la Ăşltima semana. Ahora hay que garantizar la segunda dosis», ha señalado GarcĂa-Page.
Sobre la venta de 30.000 vacunas al paĂs vecino de Andorra, ha descartado que se trate, obviamente, de un negocio, ya que tiene que ver con el hecho de que el contrato de la UniĂłn Europea no ampara al paĂs de los Pirineos.
AsĂ, tambiĂ©n Italia va a ceder vacunas a San Marino. «Nuestras fronteras son permeables», ha recordado para justificar la ayuda prestada al paĂs vecino.
El presidente castellanomanchego ha vaticinado que con las medidas más duras que se están tomando en todas las comunidades autĂłnomas en unos dĂas se notará una «incidencia clara» a la baja.
Eso es, incluso, lo que «lleva al Ministerio a dudar sobre el hecho de cambiar el estado de alarma» en estos momentos, ya que «entiende que con las medidas coherentes, en su conjunto, habrá una bajada y se podrá dominar la tercera ola».
Ahora la obligación es evitar que el contagio desbocado «se note más en los hospitales«, que aunque están aguantando mejor que en marzo y abril, empiezan a ver más incidencia. «Hay que analizar los datos semana a semana».
GarcĂa-Page ha defendido que el toque de queda es «muy elemental y claro» y se necesita un mensaje Ăşnico a nivel nacional, ya que «la confusiĂłn no es un buen procedimiento para acabar con el virus».
Es una medida casi «importada de Francia» pero desde el principio parecĂa una medida «clara y contundente» y alternativa al encierro total.
En Castilla-La Mancha «ya se ha llegado hasta donde se podĂa llegar» en cuanto a aplicar en toda su extensiĂłn las posibilidades que permite el estado de alarma.
«La inmensa mayorĂa de la gente, además, entiende mejor el toque de queda que muchas otras medidas», ha considerado el lĂder del Ejecutivo autonĂłmico.
A estas alturas, tras 10 meses de pandemia, «nadie resiste la hemeroteca», pero sigue defendiendo que las decisiones las ha de tomar cada uno «dentro de sus competencias».
Tras recordar que se enterĂł del estado de alarma de marzo por televisiĂłn a pesar de que dos dĂas antes se hablaba de tranquilidad, ha insistido en que un confinamiento domiciliario, se tendrĂa que adoptar de forma «global».
Para justificarlo, ha recordado que en Castilla-La Mancha hay 250.000 personas que a diario cruzan a Madrid a trabajar, por lo que no tendrĂa sentido hacer un cierre total en Toledo, por ejemplo. «No volvamos a la gente esquizofrĂ©nica en cuanto a quĂ© horario hay que volver a casa«, ha señalado GarcĂa-Page.