Las plataformas sociales salesianas atienden en la actualidad a más de 1.000 personas solicitantes de protección internacional o refugiadas, el doble que el año pasado, y piden al Gobierno medidas «urgentes» ante el «empeoramiento» de su situación debido a la pandemia del coronavirus Covid-19.
En concreto, solicitan la modificación del reglamento de extranjería en relación a niños y niñas que llegan solos, para que se favorezca su integración duradera y efectiva; la puesta en marcha de un proceso de regularización urgente de personas migrantes en situación administrativa irregular y de solicitantes de asilo en espera prolongada; y mejorar el sistema de solicitud de protección internacional dotándolo de mayores recursos para agilizar los trámites administrativos y proporcionar más medios en el acompañamiento.
Actualmente, según precisan, en España hay 133.015 solicitudes pendientes y la pandemia mundial de la Covid-19 «ha empeorado también la situación de las personas solicitantes de protección internacional, cuyos trámites se han visto ralentizados o paralizados».
Las entidades que forman parte de la Coordinadora Estatal de Plataformas Sociales Salesianas han continuado trabajando durante el estado de alarma y el confinamiento, y actualmente atienden a más de 1.000 personas solicitantes de protección internacional o refugiadas a través de recursos residenciales de protección internacional, programas de inserción sociolaboral, aprendizaje de la lengua y acogida.
Principalmente, acompañan a niños, niñas, adolescentes y jóvenes, muchos de ellos no acompañados. Según precisan los salesianos, en 2019, de las 118.264 solicitudes de asilo presentadas, 22.373 corresponden a menores de 18 años.
Las Plataformas Sociales Salesianas cuentan con el programa de acogida integral de jóvenes de 18 a 26 años, solicitantes de protección internacional y refugiados, financiado por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el Fondo Social Europeo y el Fondo de Asilo, Migración e Integración.
«Son jóvenes que comenzaron su proceso migratorio, en muchas ocasiones siendo menores, con el impacto que eso ha tenido en la construcción de su personalidad. Por su edad, todavía no tienen la madurez suficiente para vivir de forma totalmente autónoma. Tampoco han tenido tiempo ni oportunidad de formarse en una profesión que les permita tener un trabajo que les asegure unas condiciones de vida dignas», explican desde la Fundación Ángel Tomás- FISAT.
77% DE SOLICITUDES PENDIENTES
Durante 2019 y en lo que va de 2020 se ha atendido a 76 jóvenes solicitantes protección internacional procedentes principalmente de Guinea Conakry, Mali, Marruecos y Gambia, entre otros. Del total de solicitudes presentadas, 12 han sido denegadas, 5 aprobadas habiéndole reconocido el estatus de refugiado y 1 aprobada concediéndole protección subsidiaria. El 77% de las solicitudes presentadas por las Plataformas Sociales Salesianas continúan pendiente de resolución.
En los días previos a la conmemoración del Día de las Personas Refugiadas, que se celebra el 20 de junio, las Plataformas Sociales Salesianas continúan con la campaña iniciada el año pasado bajo el lema ‘Tu voz es también refugio’, esta vez para poner el foco en la situación de «incertidumbre» que viven en España las personas solicitantes de protección internacional.
«Desde el sistema de acogida se ha prorrogado todo hasta la fecha de vencimiento del Estado de Alarma, pero ahora, a punto de finalizar, vemos que algunas personas solicitantes de asilo están sin trabajo y sin vivienda, por lo tanto, es necesario proponer más prórrogas para que se garanticen todos los derechos fundamentales, sobre todo la salud, el trabajo, la vivienda y la educación», explican desde la Federación Pinardi.
Además, advierten de que aparte de estas trabas administrativas, existen «muchas dificultades» de acceso de los solicitantes de protección internacional para conseguir la certificación del grado de discapacidad, la ingreso mínimo vital o una vivienda pública debido a que su documentación se considera no válida para ello.
ESFUERZO E IMPLICACIÓN DE LOS JÓVENES
Desde las plataformas sociales salesianas destacan el esfuerzo y la implicación de estos jóvenes desde el primer momento de su llegada al recurso de acogida, para aprender o mejorar el idioma del país de acogida, para posteriormente realizar una formación tanto a nivel reglada como específica que mejore su empleabilidad. «Nos preocupa que no se tenga en cuenta el proceso personal, formativo y laboral del joven en la resolución de protección internacional», comentan desde la Fundación Don Bosco.
Por ello, los directores y directoras de las entidades que forman parte de las Plataformas Sociales Salesianas invitan a los ciudadanos a «imaginar», a ponerse en la piel de solicitantes de asilo como Said, Mohamad o Moussa para conocer su situación, cuyas historias se pueden conocer a través de las redes sociales oficiales de las entidades con el hashtag #TuVozTambiénEsRefugio. Con esta campaña también pretenden «frenar los bulos y las mentiras que dañan cada día a las personas solicitantes de protección internacional y refugiados».