El Rey Felipe VI ha defendido este jueves el «futuro compartido de progreso y prosperidad» de Andorra y España durante una cena oficial en su honor, en el que ha sido el primer viaje al extranjero de los Reyes tras un año sin agenda internacional por la pandemia.
El viaje, además de escenificar esa intensa relación en muy distintos ámbitos, ha permitido cumplir con la tradición de que el Rey visite el país que acoge la Cumbre Iberoamericana, que en esta ocasión se celebrará en Andorra el próximo 21 de abril y en la que está prevista la participación de Don Felipe, según explican fuentes diplomáticas.
En el discurso, Felipe VI ha recordado que Andorra «fue tierra de acogida para españoles» durante «episodios trágicos» como la Guerra Civil. «Este país fue refugio y a veces tierra de adopción definitiva para ciudadanos de las dos partes contendientes en aquella guerra», ha agradecido.
Así, el Rey ha subrayado que en los últimos años el Principado de Andorra «ha vivido importantes cambios institucionales» tras la aprobación de su Constitución en 1993 y la firma del Tratado de Buena Vecindad, Amistad y Cooperación entre Andorra, Francia y España, ingresó en las NNUU y en otras instituciones globales. «Hoy Andorra es un principado parlamentario y, como España, un Estado de Derecho plenamente democrático», ha recalcado.
En este sentido, ha destacado que las relaciones hispano-andorranas tienen una «relación profunda» que «trasciende ampliamente esa dimensión formal por causa de nuestra vecindad, de nuestra historia compartida y de los sólidos vínculos humanos, culturales y económicos que nos ligan». Por ello, ha abogado por «identificar claramente el reto de mejorar siempre nuestras relaciones bilaterales de Estado a Estado».
El monarca también ha destacado la labor de Andorra en la Cumbre Iberoamericana, que se celebrará el próximo 21 de abril. «Es de justicia poner de relieve vuestro firme compromiso con la Comunidad Iberoamericana de Naciones» (…) Para España, el vínculo con Iberoamérica constituye siempre una prioridad», ha defendido.
MUESTRAS DE SOLIDARIDAD POR LA PANDEMIA
Por otra parte, Felipe VI ha hecho referencia a la pandemia del Covid, que «no distingue entre lugares ni por la dimensión de las poblaciones». Así, ha transmitido, también en nombre de la Reina, «nuestros sentimientos de solidaridad y de afecto a todas las familias andorranas que han perdido seres queridos y a todas las personas afectadas por la pandemia en este querido país».
El Rey ha hecho referencia además al turismo, pues tanto España como Andorra tienen en este sector «uno de sus ejes fundamentales» en la economía y ha reconocido la «importante tarea de diversificación» de la economía andorrana. «Muchas empresas y muchos trabajadores españoles os acompañan en esta labor. Estoy seguro de que su espíritu emprendedor y esforzado os ayudará a superar los obstáculos y a alcanzar los objetivos fijados», ha añadido.
EDUCACIÓN Y FORMACIÓN
El Rey también ha destacado el «plural sistema educativo» de Andorra y ha hecho referencia al colegio público María Moliner, uno de los seis centros en los que se imparte enseñanza en español en el principado y al que acudirán los Reyes este viernes, y del que ha destacado que «contribuye, con instituciones andorranas y francesas, a sentar las bases educativas de las jóvenes generaciones andorranas».
Por ello, ha destacado el trabajo del Principado de Andorra en el conjunto de la región pirenaica. «Andorra desempeña, junto a otros valles del Pirineo de Lleida, de Huesca, de Navarra o de Girona, el papel de polo generador de actividad económica y trabajo para la población pirenaica», ha resaltado el monarca, quien ha declarado que «estos núcleos dinamizadores son claves para evitar la despoblación de las regiones de montaña.
«Todos estamos llamados a hacer visible la esperanza y los horizontes de progreso, y a evitar que primen el miedo y la incertidumbre en un momento de grandes transformaciones y desafíos. Se trata de una tarea histórica», ha subrayado.
En la mañana, los Reyes han sido recibidos a las puertas de la Casa de la Vall, sede histórica del Parlamento andorrano, por los copríncipes de Andorra, el obispo de la Seu de Urgell, monseñor Joan Enric Vives, y Patrick Strzoda, el representante del presidente francés, Emmanuel Macron.
Por la tarde, el Rey ha sido recibido en la sede del Govern por el jefe de Gobierno, Xavier Espot, en un encuentro al que también ha acudido la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, el jefe de la Casa del Rey, Jaime Alfonsín, el embajador de España en Andorra, Àngel Ros, y el consejero diplomático del Rey, Alfonos Sanz Portolés.
La jornada se ha completado con un encuentro de los Reyes en una cena oficial en su honor, junto a los copríncipes, en el caso de Strzoda, en representación de Macron.
