Miguel Ángel Rodríguez prepara una crisis de Gobierno: llega «la purga» de la Comunidad de Madrid

Pablo Casado y todos sus leales seguidores están en el punto de mira. El presidente del Partido Popular ha perdido la guerra interna y tiene los días contados, tal y como aseguran fuentes de Génova. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, o mejor dicho, su jefe de gabinete, Miguel Ángel Rodríguez, no se contenta con echar a Casado del poder. Quiere «vengarse» de aquellos consejeros que pasean por Sol y que se mantuvieron leales a Génova. Los dos dirigentes en los que se ha fijado la presidenta y su equipo de fontaneros son David Pérez, consejero de Transportes, y Enrique López, consejero de Interior y Justicia. La razón por la que estos dos populares encabezan la lista es porque mantuvieron un doble juego de lealtades con Ayuso y con Casado que no ha gustado nada al entorno de la presidenta de la Comunidad de Madrid. La tensión se palpa en Sol y las fuentes consultadas aseguran que es «cuestión de tiempo» que abandonen sus cargos. Pero hay más señalados.

La clave está en buscar una fórmula adecuada para echar a estos dos consejeros. Con Enrique López ya se dejó entrever tras la polémica del espionaje a Ayuso y las concesiones al hermano la «mala» relación que mantiene con la presidenta. De hecho, cuando los leales consejeros de la líder madrileña salieron a la palestra a dar explicaciones el pasado viernes sobre los contratos del hermano de Ayuso, se echó en falta la presencia de un López que se echó atrás en el último momento. Desde Génova aseguran que la razón por la que el consejero de Interior no salió a defender a su presidenta es porque es juez y porque «sabía» que hacerlo podría traerle problemas legales. Pero desde Sol insisten en que López no quería dar la cara por Ayuso porque siempre ha sido leal al aparato del partido. Sea como sea, Sol lleva tiempo con el ojo puesto en López porque conocen sus pretensiones, su ambición y sobretodo su cercanía a Casado.

David Pérez Enrique López

Con David Pérez la situación es similar, solo que algo menos tensa. En un principio, desde Sol confiaban plenamente en el consejero. De hecho, para demostrarlo, le nombraron consejero de Transportes y presidente de Metro de Madrid cuando todo el mundo colocaba a David Pérez fuera del gobierno de Isabel Díaz Ayuso. El problema es que a raíz de esta guerra interna en el equipo de la presidenta se dieron cuenta de que Pérez era leal a las pretensiones de Casado y no a su presidenta. Todo esto, enmarcado en un perfil discreto, ha puesto a David en una situación comprometida dado que en Sol aseguran que no quieren contar con él de aquí a un futuro. Y menos ahora que Casado ha perdido la batalla.

Enrique López, como gran conocedor de «secretos» del PP, podrá sobrevivir dentro del PP

Mientras se mantuvo la tensión entre el equipo de Ayuso y el de Casado, desde Sol se resistían a tomar decisiones tan radicales como no contar con alguno de sus consejeros. Sin embargo, que Casado caiga deja completamente desamparados a López y a Pérez. Las fuentes de la Comunidad de Madrid tienen claro que ambos están señalados, pero matizan que Enrique López, como gran conocedor de «secretos» del Partido Popular por sus años de militancia, podrá sobrevivir dentro del PP pase lo que pase. Con David Pérez no lo tienen tan claro dado que Ayuso podrá convertirse, además, en la presidenta del PP de Madrid de aquí a no mucho tiempo siempre que no dé el salto directo a la presidencia del Partido Popular. En cualquiera de los dos escenarios, queda claro que Isabel tiene la sartén por el mango y quienes apostaron por el otro bando estarán en una situación compleja.

Las fuentes de Sol destacan que, dados los tiempos, lo natural será que Ayuso se espere a que se celebren las elecciones autonómicas del año que viene para tomar decisiones. También dejan claro que en ese momento López y Pérez estarán fuera. Incluso en el caso en el que la presidenta de la Comunidad de Madrid se vaya de candidata a las elecciones generales, Ayuso teledirigirá su sucesión en la capital para así mantener el control de uno de sus feudos. Pase lo que pase, las fuentes dejan claro que López y Pérez no tienen un largo recorrido político bajo el mando de Isabel.

LOS OTROS SEÑALADOS

Miguel Ángel Rodríguez tiene cogida la matrícula a más de uno en la administración. Especialmente a aquellos que ejercieron de «topos» de Génova durante la legislatura y aquellos que esperaban dar el salto con Casado cuando éste se convirtiera en presidente del Gobierno. Ahora, personas como Maria Teresa Nuñez Marcos, jefa de gabinete de Enrique López, asesores del mismo como Luis Felipe Arespacochaga Rico, Ricardo Ibañez Salas o Lorenzo Pérez Rojo están el punto de mira de Miguel Ángel. Y son solo una pequeña parte a la que hay que sumar también a Laura Gutierrez Barreno.

Junto a esto, también está Carlos Izquierdo en el punto de mira. Pero el resumen es que todos los que han venido de la mano de los «fieles a Casado» que ejercieron de topos acabarán completamente fuera del escenario político en cuanto Miguel Ángel Rodríguez tenga la excusa. Se habla de momento de «la purga» y de una crisis de Gobierno más pronto que tarde.

PALOMA MARTÍN, OSSORIO Y LASQUETTY, DE ENHORABUENA

Hay tres consejeros que sí que crecerán con la presidenta. La primera de ellas es Paloma Martín, consejera de Medio Ambiente. Desde Génova la tienen cogida la matrícula desde hace tiempo porque la consideran desleal. Fuentes del PP destacan que fue Casado quien le dio todo lo que tiene en un momento en el que Paloma se asomó al abismo laboral. Y a cambio, Paloma se posicionó rápido en la guerra del PP en favor de Ayuso, y no de Casado. Esta fuerte apuesta le ha valido a la consejera posicionarse bien de cara al futuro. Pase lo que pase con Ayuso, Paloma crecerá siempre que la presidenta de la Comunidad de Madrid no caiga en desgracia por nuevas sorpresas relacionadas con el contrato de su hermano.

Junto a Paloma Martín, hay otros dos consejeros que se mantuvieron leales a las pretensiones de la presidenta y que ahora podrían crecer a nivel político (siempre que Ayuso consiga dar un salto hacia delante). Ellos son el de Hacienda, Javier Fernández Lasquetty, y el de Educación, Enrique Ossorio. Ambos tomaron partido por Ayuso tan pronto como pudieron y su lealtad será premiada por la presidenta, tal y como aseguran fuentes de Sol. Unos crecen y otros caen en desgracia.