Leche desnatada o entera: Desvelamos la leche más saludable

Si hay un producto de primera necesidad y de gran consumo en España, junto con el pan, es la leche. Pero los modos de consumo han cambiado y con los nuevos tiempos y la moda de lo sano, han hecho aumentar el consumo de leches como la desnatada, sin lactosa o incluso leches derivadas de lo vegetal y no animal como la de soja. Pero vamos a centrarnos en las aún dos más vendidas: la desnatada y la entera, y ver cuál es de verdad más saludable y conveniente.

Ante esta pregunta, te adelantamos que la respuesta no es tan sencilla. No sólo por las propiedades de cada una, sino por el aluvión de información en forma de encuestas, estudios, informes y opiniones de redes sociales, en muchos casos sin ningún rigor científico. Así que es momento de arrojar luz en este tema.

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Datos concretos

Es tan mala la leche

Según el BOE, la diferencia principal entre leche entera y desnatada radicará en la proporción de grasa que incorpora y señala los parámetros: la entera tendrá un contenido mínimo de grasa de 3,5 gramos en 100 gramos de producto; en la desnatada estará en un máximo de 0,5 gramos. En la semidesnatada hablamos de entre 1,5 y 1,8 gramos.

La leche es uno de los alimentos más completos nutricionalmente: es fuente de proteínas, grasa, lactosa, minerales y vitaminas. Entre los minerales, destaca la presencia del calcio y el yodo, y en vitaminas, la A, E y sobre todo la D.

Un dato muy importante: la leche desnatada mantiene un mismo porcentaje de proteínas y calcio, pero también de azúcares, en forma de lactosa. Sin embargo, al retirar las grasas, con la desnatada pierdes las vitaminas A, D y E. Por eso, si vas a consumir la desnatada, elige la variedad enriquecida con vitaminas.