La cerveza en España y en gran parte del mundo es más que una bebida, es una casi religión y una forma de vivir. En nuestro país va unido a la vida social. Para quedar ya directamente usamos la expresión «tomar unas cañas». Da igual que al final las tomes o no. Así que siempre hay curiosidad y toda una filosofía y literatura sobre mejores cervezas, cómo tomarlas y por supuesto como servirlas. Tirar bien una caña es todo un ritual y para muchos cerveceros una obsesión. Hay camareros más novatos y auténticos maestros, así que te mostraremos los trucos y técnicas de los mejores.
LOS PRIMEROS PASOS
Lo primero que hay que tener en cuenta es si se sirve en copa o vaso, porque la técnica y el resultado es diferente. De cualquier forma, el segundo paso es refrescar la copa o el vaso con ayuda de un mojacopas o con un chorro de agua fría. Esto evita la mala formación de espuma y crea en las paredes del vaso una finísima película de agua que ayuda a que la cerveza se deslice con suavidad.
A continuación llega ya el vertido de la cerveza. Hay que descartar el primer golpe de espuma, como habrás visto a muchos camareros (es decir, los que lo hacen bien). Obviamente hablamos de la cerveza servida desde grifo. Hay que descartar el primer golpe de espuma, que no entre en la copa o vaso, ya que es la que se ha quedado en el grifo y ha cogido aire del ambiente.
