El invierno es una de esas épocas en las que más apetece estar en el hogar. A pesar de la subida de bienes esenciales como la luz o el gas, lo cierto es que son muchas las personas que no renuncian a dormir con la calefacción puesta.
Esto, que parece añadir un extra de comodidad, podría no ser tan bueno para la salud como piensas. De hecho, son varios los expertos que recomiendan hacer todo lo contrario: el radiador, mejor durante el día.
¿Lo sabías? Descubre los motivos por los que no deberías dormir con la calefacción puesta toda la noche.
Cansancio y sudoración excesiva, consecuencias inmediatas
Una encuesta llevada a cabo en Reino Unido por Slumberdown, una marca de ropa de cama, recoge que el 47% de las personas que suelen dormir con la calefacción puesta durante la noche no se sienten bien al día siguiente. De hecho, padecen síntomas como dolor de cabeza o deshidratación. Por otro lado, otras personas afirman haberse despertado durante la noche cubiertos de sudor. Todo ello puede ser perjudicial, ya que modifica la temperatura natural del cuerpo, como explicaba el experto.
