Los fideos instantáneos y las sopas de sobre son un tipo de comida rápida que se han vuelto muy populares en los ritmos tiempos. Se preparan en un par de minutos, tienen un sabor sabroso y son una opción recurrente, sencilla y muy barata para esos momentos en los que apenas hay tiempo para cocinar.
El problema es que, como muchos tipos de comida rápida, se trata de productos que podríamos clasificar como “basura” o “chatarra” al mismo nivel que un menú de hamburguesa o los embutidos ultraprocesados. Hay personas que piensan que por ser platos más ligeros, no tienen tantas consecuencias para la salud, pero nada más lejos de la realidad. ¿Cuáles son los principales problemas derivados del consumo de este tipo de productos? Vamos a verlo a continuación.
1DIGESTIONES LENTAS
En primer lugar, aunque parezcan comidas poco pesadas, las sopas y los fideos instantáneos no son de fácil digestión. Después de comer uno de estos preparados, los fideos se pueden quedar hasta dos horas intactos en el estómago, un tiempo mucho más prolongando de lo que necesita el cuerpo para digerir y asimilar un plato de sopa o de fideos caseros. Una digestión tan lenta puede tener un serio impacto en la salud.
