El «inmovilismo» de Alberto Núñez Feijoo se ha agravado por las encuestas. El Partido Popular empieza a ver la posibilidad de que la irrupción de la vicepresidenta Yolanda Díaz ayudará al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a mantener la Moncloa. Las expectativas electorales del PP se hunden y Alberto Núñez Feijoo sigue escondiendo la cabeza. En Génova ya empiezan a verse las quejas por el hecho de que el estilo del presidente gallego es literalmente «el mismo» que el de Mariano Rajoy. Inmovilismo, estatismo y de vez en cuando alguna declaración sin arriesgar. En Génova culpan a su equipo, ese mismo que le acompañó durante su legislatura en la Xunta de Galicia y que ahora gestiona el partido a nivel nacional como si de su comunidad autónoma se tratara. Y una vez más, las fuentes de Génova repiten la misma frase: «Esto no es La Voz de Galicia».
La nuevas noticias son los sondeos internos y las encuestas que se han hecho públicas a través de los medios de comunicación. Ya se empieza a ver que el PP ha salido perjudicado tras la moción de censura. Las encuestas hablan de que el PSOE podría mantener la Moncloa y sumar con Yolanda Díaz. Todos los planes del presidente del Gobierno podrían salir como espera especialmente porque el PP de Feijoo no tiene mordiente. Esto, que empieza a ser un motivo de desesperación dentro del Partido Popular, no parece importar al «clan gallego» que sigue encerrado en Génova recomendando a su presidente que se mantenga apartado de los focos para no cometer errores. Las similitudes con Mariano Rajoy son enormes, y eso sin entrar en los nombres con los que Feijoo querría contar para formar su hipotético Gobierno (cada vez más lejano).
Ahora mismo, el PP afronta unas expectativas malas. Lo son no solo porque en caso de llegar a sumar con Vox necesitarían a Santiago Abascal para formar Gobierno. Los planes de Feijoo se complican por minutos y empieza a escucharse en los pasillos de Génova la idea de que el papel del presidente del Partido Popular en la moción de censura no fue el más adecuado, sin entrar en más detalles. Las críticas internas a Feijoo crecen porque los sondeos internos reflejan que la actitud del líder gallego no es la más adecuada para afrontar este periodo electoral. Ahora mismo, las esperanzas están puestas en las elecciones autonómicas y municipales, pues el clan gallego confía en que el hipotético batacazo que se dará el PSOE en estos comicios lanzará al PP de cara a las generales.
Los críticos de Génova señalan a Feijoo por básicamente haberse encerrado en sí mismo junto con el mismo equipo que gestionó la Xunta de Galicia y haberse rodeado de ministros de Rajoy para intentar salvar al partido de cara a la galería con rostros conocidos. En el PP están desesperados porque no saben ni siquiera cómo acceder a la cúpula del partido, encerrada en sí misma desde el mismo momento en que en Sevilla coronaron a Alberto Núñez Feijoo como presidente del Partido Popular. En Génova entienden que esto «ya lo han vivido» con Rajoy y saben que «no sale bien». El problema es que las pocas veces que Feijoo se ha lanzado a enviar mensajes no ha salido precisamente bien.
El «clan gallego» tiene claro que la estrategia a seguir tiene que ser la misma que la de la Xunta. Lo mismo con la prensa, pues de momento se mantienen lo suficientemente aislados como para no permitir casi preguntas de los periodistas. Sea como sea, desde el entorno de Feijoo sí que quieren hablar y levantar la voz porque ven que las encuestas les están «comiendo» de tal forma que como sigan así harán que Sánchez revalide su puesto.