No hay nadie más peligroso que alguien que no tenga nada que perder. Este no es del todo el caso del concejal y candidato de Vox al Ayuntamiento de Madrid, Javier Ortega Smith, pero lo cierto es que está en una posición mucho más «cómoda» que la del alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida. El PP necesitará a Vox para gobernar, previsiblemente. Y en el Partido Popular saben, según las fuentes del Consistorio, que Ortega Smith no solo no tiene buena relación con Almeida, sino que exigirá asientos por su apoyo, además de medidas contundentes como la retirada de Madrid 360. Si Javier Ortega Smith tiene la llave, exigirá la vicealcaldía o el área de Movilidad y Medio Ambiente; aunque otras voces dejan claro que se conformaría con el control de Seguridad y Emergencias.
La idea de Ortega Smith es dar un golpe encima de la mesa. Le han defenestrado a nivel interno apartándole de la secretaría general de Vox. Sin embargo, Ortega Smith cree que tiene mucho que decir… y más en una capital que tiene unas cifras muy ajustadas. José Luis Martínez Almeida no las tiene todas consigo para conseguir la alcaldía sin necesidad de apoyos. Evidentemente, en la izquierda no darán su brazo a torcer, por lo que el alcalde de la capital solo puede mirar hacia Vox (eso siempre que Ciudadanos no dé la sorpresa y ofrezca un giro de 180 grados). En este contexto, es Ortega Smith quien tiene la llave de gobierno y quien ya tiene claro que o tiene asientos o no dará su apoyo al alcalde pase lo que pase. El punto de inflexión, la línea roja, es Madrid 360 y permitir a los madrileños circular por el centro de la capital.
Javier Ortega Smith exigirá o bien la Vicealcaldía de la capital o bien el Área de Movilidad y Medio Ambiente. Evidentemente, Ortega Smith prefiere lo primero, pero está abierto a negociar siempre que con ello consiga apuntarse el tanto del fin de Madrid Central, Madrid 360 o como se llame entonces. La obsesión del candidato de Vox con este asunto ya se ha dejado ver en campaña. El concejal ha asegurado que prefiere que desde Bruselas le impongan una multa antes que crujir a los madrileños con multas por circular por el centro de Madrid. Controla el Área de Movilidad y Medio Ambiente es clave para asegurarse de que se cumplen sus exigencias. Pero ser la nueva Begoña Villacís tampoco disgusta al dirigente de Vox más defenestrado por su propio partido.
Ortega Smith se ha convertido en la pesadilla más aterradora de José Luis Martínez Almeida. No porque no se lleven bien, que también, sino porque ahora mismo el concejal es completamente inmune a la amenaza de «si no nos apoyáis, gobernará la izquierda». El PP no tiene muchos elementos con los que negociar porque al concejal no le importa dejar caer el tinte conservador de la capital si no le dan un puesto relevante y si no ceden a sus exigencias y pretensiones. Ahora mismo, Ortega Smith quiere apuntarse tantos en materia de seguridad (okupas y manteros, algo que dejó claro en los vídeos que grabó durante la campaña electoral) y sobretodo con Madrid Central y la circulación por el centro de la capital. Hasta las pegatinas de la DGT podrían quedarse fuera de lugar.
Los nombres están ajustados y colocar a Ortega Smith como vicealcalde apartaría a Inmaculada Sanz, quien tiene pretensiones que van más allá de ser portavoz. Ahora mismo está todo en el aire, pero los ánimos en el Partido Popular están algo caldeados dadas las cifras que amenazan con convertir al alcalde en un «esclavo» de Ortega Smith si quiere conservar la alcaldía. La opción B, sin embargo, es una de las que más agradan en el PP porque la ven «menos mala». Darle a Ortega Smith el control el Área de Medio Ambiente y Movilidad es algo que el PP ve con buenos ojos siempre que se quede ahí, en una concejalía de peso pero que deja lejos al candidato de Vox del de el PP. Pero habrá que ver los resultados y sobretodo ver cuántos concejales saca el partido conservador en Madrid.
