Soluciones de Gestión, la empresa en la trama central del Caso Koldo de corrupción, defraudó además 200.000 euros a la Agencia Tributaria aragonesa, según la investigación de la UCO de Guardia Civil que ha incorporado estos datos por si alguien además hubiese incurrido en un delto fiscal.
Según los investigadores, «Soluciones de Gestión habría cometido un fraude fiscal de 200.000 euros en el año 2020. De acuerdo al informe 90-24 emitido por la Delegación Especial de Aragón de la AEAT, incorporado a este procedimiento mediante mandamiento judicial de fecha 22 de enero, esta sociedad dejó de ingresar 200.000 euros del Impuesto sobre Sociedades de 2020 como consecuencia de un ajuste fiscal por deterioro de crédito en 2019, en el que hay que valorar su finalidad defraudatoria por los hechos ya expuestos».
La oportuna irrupción de una inspección de Hacienda en las empresas concesionarias de los contratos del Estado investigados por la Audiencia Nacional fue clave en el caso para que los supuestos implicados comenzasen a ponerse nerviosos y hablasen por teléfono entre sí, facilitando datos y aportando pruebas a los guardias civiles, que a su vez grababan y escuchaban esas conversaciones.
OPORTUNA IRRUPCIÓN DE HACIENDA A KOLDO
Eso les ocurrió a Juan Carlos Cueto (supuesto beneficiario final de los contratos de mascarillas) e Íñigo Rotaeche (empresario que fue propietario de Soluciones de Gestión, empresa concesionaria de los contratos). Un ejemplo, «el 4/12/2023 Cueto (Grupo Cueto) llama a Íñigo al que comenta: esto era un favor que le estaba pidiendo tu vecino (Koldo)… él y su ex jefe (el ministro Ábalos)… y parece ser que el otro ha dicho que sí… porque le han dado otro favor a cambio».
El temor al resultado de la inspección de Hacienda y a la reclamación de 3 millones de euros que efectuaba el Gobierno autonómico de Baleares, presidido en esas fechas por Francina Armengo, por unas mascarillas defectuosas llegó a ser tan real que «Cueto da instrucciones para que se prepare una reestructuración de Soluciones de Gestión, debido al impacto económico que produciría tener que atender la citada reclamación (200.000 euros), y por otra parte, solicita que vayan preparando una futura demanda ante el (Tribunal) Contencioso Administrativo con la referida Administración (AEAT)», escriben los investigadores.
El 20 de diciembre de 2023, «Cueto volvió a pedir ayuda económica a José Ángel Escorial Senante (antiguo administrador de Soluciones de Gestión), solicitándole que aportase la cantidad de 100.000 euros. En este sentido, en conversación entre Cueto e Íñigo de 05/01/2024 en la que Juan Carlos Cueto le informa que ha estado hablando con ‘Josean’ (José Ángel) quien le ha dicho que como máximo el viernes les hace entrega de los 60.000 euros. Ante la aseveración de Íñigo que Escorial debe entre 600.000 y 700.000 euros, Cueto afrma ‘claro que lo sabe, si aquí debe todo el mundo, todo el mundo debe dinero», según recoge la investigación.
LA UCO ESCUCHABA A KOLDO
Respecto a la reclamación de Baleares, en una de las conversaciones interceptadas por la Guardia Civil «se infiere que la resolución dictada sobre esta reclamación establece por una parte que si la Administración balear en el plazo de tres meses -fecha límite el 16 de enero de 2024- no se ha pronunciado expresamente, se produciría la caducidad del procedimiento administrativo, y por ende, la reclamación de casi tres millones de euros».
Tal y como ha venido contando MONCLOA, una llamada de Hacienda a finales de 2022 al empresario Víctor Gonzalo de Aldana para que justificase las cuentas de dos de sus empresas, desató el nerviosismo en toda la organización.
Lo que no sospechaban entonces los empresarios investigados en el caso Koldo, detenidos por orden de la Audiencia Nacional a excepción de Cueto, es que agentes de la UCO de Guardia Civil estaban vigilando ya todas las llamadas y encuentros que iban a realizar desde entonces para tratar de arreglar y cuadrar los números. Dos inspecciones de la ONIF y otra de la Agencia Tributaria provocaron tal nerviosismo entre todos los integrantes de la trama, hasta siete imputados, que comenzaron a hablar por teléfono.
GUARDIA CIVIL Y JUAN CARLOS CUETO
El primero de los seguimientos que hizo la Guardia Civil se produjo el 15 de febrero de 2023, hace ahora un año, y los llevó hasta en el madrileño restaurante La Chalana, frecuente punto de encuentro de Koldo García, ex asesor del ministro Ábalos, con empresarios.
Dos agentes de seguimiento, sentados en una mesa al lado, lograron grabar la conversación entre Koldo García, y el empresario Juan Carlos Cueto, uno de los principales beneficiados en este presunto caso de corrupción.
Ambos hablaban sobre la inspección de la ONIF (Oficina Nacional de Investigación del Fraude) a las empresas MTM 180 Capital y Deluxe Fortune por «intermediar en la adjudicación de los contratos denunciados ante la Fiscalía Anticorrupción», según el sumario. A partir de ahí el hilo desenredado de la madeja fue llevando a los investigadores a personas y empresas que, presuntamente, colaboraron en el Caso Koldo, primer gran caso de corrupción del Gobierno socialista de Pedro Sánchez.
