«¡Adelgaza en 10 segundos!» es una frase difícil de creer, pero existe un truco muy senciollo que puede marcar la diferncia en tu cuerpo y aquí te lo explicaremos. Bajar de peso es un objetivo común entre muchas personas, sin embargo es un proceso que requiere tiempo y dedicación, de manera que muchos buscamos algún truco que nos ayuden a acelerar un poco el paso y así alcanzar las metas en menor tiempo. Aunque existen muchos métodos que ayudan, está comprobado científicamente que existe un hábito matutino que puede contribuye en la pérdida de peso.
Muchos hablan de hacer muchos ejercicios, bajar la ingesta de calorías, eliminar las grasas o tomar infusiones milagrosas, pero la verdad es que hay un método mucho más simple y efectivo: masticar la comida muy bien la comida. Parece algo simple y, tal vez no le encuentres mucho sentido, pero la verdad es que este hábito es muy efectivo, especialmente cuando se convierte en una acción matutina a la hora del desayuno.
Adelgaza con el truco de masticar muy bien el desayuno
Según un estudio publicado por la revista Scientific Reports, masticar mejora el gasto de energía relacionado al metabolismo de los alimentos, además de mejorar el tránsito intestinal, lo cual mejora la termogénesis, que es la producción de calor en el cuerpo después de comer. La investigación indica que esté efecto térmico generado en el consumo de alimentos, aumenta el gasto de energía por encima del nivel basal en ayunas y esto resulta un factor determinante en la pérdida de peso.
En este sentido, los investigadores analizaron y descubrieron que el comer despacio y masticar lento adelgaza gracias al incremento de la termogénesis. Esto es especialmente efectivo cuando se cumple en la mañana a la hora de la primera comida, ya que el gasto de energía se enfoca en las calorías reservadas.
Otros hábitos que te pueden ayudar a adelgazar
Comer despacio y masticar bien debe venir acompañado de otros hábitos saludables para que la perdida de peso sea notoria. Es indispensable llevar una alimentación balanceada con un déficit caloríco para que existan resultados. Además, esto debe venir acompañado de actividad física que englobe tanto ejercicios de fuerza para desarrollar musculatura como cardio para mejorar la resistencia cardiopulmonar.
Por otro lado, es recomendable dejar de lado hábitos que pueden sabotear los resultados. El consumo de alcohol, las bebidas azucaradas, los alimentos ultraprocesados y los desvelos pueden convertirse en obstáculos para lograr una pérdida de peso saludable. Por el contrario, estos malos hábitos pueden generar un incremento de grasa y desequilibrios en el organismo.
