El término slow down cada vez se hace más popular a través de las redes sociales y es que este concepto promete hacer que las personas lleven un estilo de vida muy tranquilo, lleno de bienestar, libre de estrés y sin ansiedad. Pero, ¿en qué consiste esta filosofía de vida que cada vez se vuelve más viral? Aquí te explicaremos los detalles.
En la actualidad, la mayoría de las personas manifiestan tener una vida muy ajetreada, constantemente sienten que están en una carrera sin fin. En este sentido, parece imposible tener momentos de tranquilidad, bienestar emocional y relajación. Pero la realidad es que existe un método que puede cambiar toda esta perspectiva y permitir que cada individuo conecte consigo mismo en un estado de neutralidad y calma.
¿Cómo funciona el slow down?
El slow down consiste en un enfoque que invita a las personas a detener ese ritmo acelerado en sus rutinas y establecer un modo de vida tranquilo, relajado y lleno de disfrute en el aquí y en el ahora. Aunque muchos pueden pensar que para lograr la relajación es necesario dejar aquellas responsabilidades que pueden generar estrés, sin embargo esta filosofía de vida está alejada de esto, pues en realidad consiste en tener un mejor control frente a todas estas situaciones.
Este método está conformado por 4 pilares fundamentales que, aplicándolos en la cotidianidad, pueden guiar a una vida más estable emocionalmente. El primero de estos es aprender a priorizar, pues para desacelerar el ritmo es crucial saber identificar aquello que es realmente importante, de modo que sea más sencillo organizar el tiempo. Por otro lado, es indispensable aprender a simplificar la vida, que implica dejar de lado todo aquello que es superficial, tanto desde el punto de vista material como emocional, ya que esto evitará distracciones y. ruidos innecesarios que solo generan agotamiento.
Aprender a planificar es una base fundamental del slow down
El tercer pilar de esta filosofía de vida es realmente importante y consiste en desarrollar la capacidad de organización, planificación y ejecución de las actividades de tareas. Esta debe ser con un enfoque consciente y flexible en el que se respeten los tiempos tanto para las responsabilidades como para el descanso, el ocio y la relajación.
Finalmente, tener autocuidado es el cuarto pilar del slow down. Esto significa apreciar aquellos momentos pequeños que refuerzan la individualidad, como leer un libro, disfrutar de un café, tomar un baño largo o cualquier actividad que, por banal que parezca, nos genere satisfacción personal genuina, debido a que se trata de momentos de placer importantes.
