Iñaki Gabilondo vuelve a ocupar un lugar central en la pantalla pública y lo hace con la serenidad y la autoridad que siempre lo han acompañado. Para muchos espectadores, su regreso supone reencontrarse con una voz que ha marcado el periodismo español durante décadas y que ahora se presta a un desafío distinto, más divulgativo y más conectado con la esencia cultural del país. No es habitual que una figura de su talla se embarque en un proyecto de estas características, de modo que su presencia añade un peso especial a la propuesta.
En esta nueva etapa, Iñaki Gabilondo se convierte en la imagen de un programa que no solo busca entretener, sino también reivindicar la riqueza de la lengua española desde un prisma histórico y social. La apuesta de RTVE llega en un momento en el que las instituciones públicas tratan de renovar su compromiso cultural y, en ese contexto, la integración de Gabilondo en este formato parece una declaración de intenciones. Su figura, cercana y respetada, funciona como puente entre la memoria del oficio y una mirada hacia el futuro.
2Una serie ya terminada y preparada para su emisión
Aunque RTVE había guardado silencio hasta ahora, ‘La gran aventura de la lengua española’ se encuentra completamente grabada y lista para ver la luz. Se trata de ocho episodios que se emitirán tanto en La 2 como en RTVE Play, siguiendo una línea de contenido cultural que la cadena pública busca potenciar en su parrilla. La dirección corre a cargo de Pepe Azpiroz y apuesta por un tratamiento visual y narrativo que acompañe al espectador sin imponerse, con explicaciones claras y pasajes históricos que se detienen en detalles poco conocidos.
El recorrido planteado no se limita a una cronología académica, porque Iñaki Gabilondo aporta un tono cercano que ayuda a concebir la lengua como una aventura compartida que atraviesa continentes, pueblos y épocas. La serie no solo estudia el desarrollo del español desde la Alta Edad Media hasta su expansión por América, sino que se detiene en la influencia de las lenguas indígenas, en el peso de los procesos políticos y en la manera en que la literatura ha sido motor y espejo del idioma. El objetivo es que cada episodio ofrezca al público una comprensión emocional de cómo una lengua se convierte en patrimonio común.






