Desde el Ayuntamiento de Mogán, Gran Canaria, la alcaldesa Onalia Bueno lleva dÃas denunciando la penosa situación en la que se encuentran los inmigrantes que han desembarcado en las últimas semanas en el puerto de ArguineguÃn. Ante lo que consideran inacción por parte del Gobierno central, el campamento de Cruz Roja en el muelle ha llegado a tener 1.500 inmigrantes hacinados en su peor momento, siendo un espacio incapacitado para alojar siquiera a 100 o a 200 personas.
Fuentes de Moncloa.com han compartido un vÃdeo en el que se ve cómo una rata se pasea por el lugar donde duermen, al aire libre y con solo una manta separándoles del suelo, varios migrantes.
Onalia Bueno ha denunciado que varios migrantes ya han contraÃdo enfermedades de la piel debido a la exposición al sol continua y las condiciones insalubres del lugar, en lo que considera una «crisis humanitaria» de grandes proporciones. Un entorno que, pese a que se practica PCR a los inmigrantes nada más llegar, no contribuye a la seguridad sanitaria frente al coronavirus en Canarias.
Este campamento de Cruz Roja se levantó en septiembre como una «solución provisional, de emergencia», por lo que la situación «podÃa ser comprensible en un primer momento, pero no ahora, cuando lleva más de dos meses abierto«, contó Onalia Bueno a medios.
Además, hasta 400 de estos ‘sin papeles’ llevan dos semanas durmiendo a la intemperie, en un espacio con ratas y hedores, del todo incapacitado para alojar a personas. AsÃ, las condiciones humanas de este campamento sobrepasado por la ola migratoria exigen una respuesta que no llega, más allá del desvÃo de migrantes a hoteles ante la falta de espacios donde alojarlos.
CRISIS MIGRATORIA AGRAVADA POR LA COVID
Esta situación se lleva produciendo ya varias semanas. Desde principio de año, han llegado a las islas Canarias 10.500 inmigrantes, la mayorÃa desde agosto. La presión caracterÃstica del mes de agosto unida a las circunstancias especiales de este año, como la imposibilidad de trasladar a migrantes a sus paÃses de origen debido al cierre de fronteras por la Covid, contribuyen a formar un hacinamiento en este puerto Canario que no da a basto.