La pandemia del Covid-19 no sólo está trayendo consecuencias directas del contagio en sÃ, de los ingresos y de las muertes, sino las indirectas derivadas de las secuelas, de no tratar otras enfermedades como se hacen habitualmente, o de nuevas dolencias y problemas derivados del coronavirus. Uno de esos problemas es la fatiga pandémica, asà que es el momento de indicarte siete consejos de los expertos para poder combatirla, sobre todo de Richard Horton, médico y editor de The Lancet, planteaba hace unas semanas en un artÃculo que para poder superar la pandemia habrÃa que entenderla como una sindemia.
Hartazgo, desasosiego, ansiedad por una incertidumbre insostenible, miedo ante lo desconocido, desconfianza en las autoridades… Son solo algunos de los efectos de haber creÃdo superada la situación desbordante desencadenada por la Covid-19 para poco tiempo después regresar a un escenario similar. Las dolencias o secuelas no sólo están afectando a los cuerpos sino a las mentes, con un aumento preocupante de cuadros depresivos o de ansiedad. En este caso esas consecuencias psicológicas afectan al cuerpo en forma de fatiga y al revés, creado un cÃrculo vicioso que hay que intentar cortar y tratar. Y la fatiga emocional por la situación empieza a ser otra epidemia: según las estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), afecta ya al 60 % de la población europea. Veamos algunas estrategias individuales y psicosociales que, sumadas a las polÃticas sociales, pueden ayudar a combatir la fatiga emocional.
1Afrontar el hecho de que la pandemia no es un paréntesis
La primera estrategia individual que debemos poner en marcha es «hacernos cargo de que no era un paréntesis, y de aquà que la nostalgia, si alguien confiaba en ella, resulte estéril, al igual que la espera pasiva. Nadie vendrá a salvarnos, ni con su carisma ni con sus invenciones tecnológicas. Y, además, lo perdido ya es irrecuperable como tal», señala José Ramón Ubieto, psicoanalista y profesor colaborador de los Estudios de PsicologÃa y Ciencias de la Educación de la UOC.
«Nos estamos equivocando pensando constantemente en la pandemia como una emergencia, porque tiene temporalidades que van más allá de la emergencia, del peligro del colapso sanitario«, explica Israel RodrÃguez Giralt, profesor de los Estudios de PsicologÃa y Ciencias de la Educación e investigador principal del grupo Care and Preparedness in the Network Society (CareNet) de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC). Señala que el SARS-CoV-2, además de matar a gente o colapsar el sistema sanitario, provoca efectos más a largo plazo en muchas de las personas contagiadas. Por ejemplo, secuelas y sÃntomas persistentes, crisis de salud mental o problemas de desconfianza en las autoridades.
Â