viernes, 13 diciembre 2024

Sánchez ataca a Casado por no romper con Cospedal tras su reunión con Villarejo

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, salió ayer a la carga contra el líder del PP, Pablo Casado, una vez que se han conocido las grabaciones publicadas por MONCLOA.COM en las que se desvela que María Dolores de Cospedal encargó al comisario José Manuel Villarejo «trabajos puntuales».

Al ataque del jefe del Ejecutivo se ha unido el de la vicepresidenta Carmen Calvo. Cospedal no ocupó ayer su escaño en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados. Tampoco se produjo ninguna declaración de apoyo por parte del líder del PP, Pablo Casado.

Sánchez introdujo el asunto de las grabaciones que realizó Villarejo en su reunión con Cospedal al responder a una pregunta en el Pleno del Congreso de Casado. El jefe del Ejecutivo fue interpelado por el líder de los populares para que rompiera con los partidos nacionalistas.

En ese momento, el presidente del Gobierno aprovechó para invitar a Casado, en una referencia implícita a Cospedal, a que “rompa con el pasado más turbio del PP”. Pedro Sánchez añadió: “la pregunta que hay que hacer es qué favores debe usted a algún diputado o diputada de su grupo parlamentario, para no luchar contra la corrupción y abrir de una vez por todas la regeneración en el PP”. Precisamente, la exministra de Defensa fue uno de los apoyos que recibió Casado en las primarias que le llevaron a la presidencia del Partido Popular.

La noticia de que Cospedal encargó trabajos a Villarejo también sirvió a la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, para contraatacar en otra pregunta del Partido Popular. La diputada del PP Beatriz Escudero recriminó a Calvo porque la ministra Dolores Delgado se mantuviera en el Gobierno tras conocerse el contenido de un almuerzo con Villarejo.

La vicepresidenta no dejó pasar la oportunidad de establecer distancias entre lo ocurrido con la ministra Delgado y con Cospedal. Calvo señaló que la exsecretaria general del PP “intentó pagar para obstruir a la Justicia cuando era la responsable de un partido”, y lo hizo en la sede del mismo.

Calvo señaló que hay “un abismo” entre lo que se ha conocido de Cospedal y la actuación de Delgado, y recordó que se trataba de “una grabaciones ilegales, de una ciudadana particular, de una comida privada, de hace nueve años”.

La diferencia con las grabaciones de Cospedal, según la vicepresidenta del Gobierno, es que María Dolores de Cospedal “era la responsable de un partido político, en la sede de su partido político, intentando pagar para obstruir la Justicia”.

Por su parte, el secretario general del PP, Teodoro García Egea, afirmó que no existe “ningún delito, ni ningún ilícito” en el contenido de la reunión entre Cospedal y Villarejo. García Egea, como otros miembros del PP, subrayó también que la exsecretaria general de su partido no mintió sobre su reunión con Villarejo, a diferencia de la ministra Dolores Delgado, que tuvo que admitir haber tratado con el excomisario tras negarlo en primera instancia.

Por su parte, el vicesecretario general del Partido Popular, Javier Maroto, aseguró que “a día de hoy” no existe ningún motivo para que Cospedal deba dimitir. En cualquier caso, algunos miembros del PP, como el exministro de Justicia Rafael Catalá, prefieren que sea la propia exsecretaria general la que responda a los interrogantes sobre esta reunión.