Pablo Casado ha centrado su campaña en su «único adversario», Pedro Sánchez. Este martes, el líder del PP ha preguntado al presidente del Gobierno en funciones si presentará su dimisión en el caso de obtener menos escaños en las elecciones del 10 de noviembre, como auguran algunas encuestas. Según Casado, el único motivo de esta repetición electoral era la insistencia de Sánchez en obtener una «mayoría suficiente» para gobernar, algo que no parece que vaya a suceder.
Así se ha pronunciado en la conferencia-coloquio del XXII Congreso Nacional de la Empresa Familiar que se celebra en Murcia, donde ha expuesto ante decenas de empresarios su «plan España» para «recuperar la senda de crecimiento económico» en un momento de «desaceleración».
A dos días para que arranque la nueva campaña electoral, Casado ha recriminado a Sánchez su «incapacidad» para desbloquear la situación política en España cuando tras los comicios de abril tenía opciones de pacto con Ciudadanos, Podemos, los regionalistas e incluso los independentistas. Según ha añadido, repetir las elecciones supone «un coste innecesario» y todo apunta a una «mayor fragmentación del espacio político».
«Ahora que se repiten las elecciones, a mi me gustaría hacer una reflexión. Pedro Sánchez si saca un escaño menos, ¿va a dimitir después de haber llevado al país a unas nuevas elecciones teniendo cuatro posibilidades de pacto distintas?», se ha preguntado, para añadir: «¿Para que eran las elecciones entonces? Como decían ellos, para superar los 123 escaños y tener una mayoría suficiente para gobernar, que todo indica que no van a tener».
BLOQUEO E INESTABILIDAD «ASOCIADOS A SÁNCHEZ»
En su intervención, Casado ha reiterado que el bloqueo y la inestabilidad en España «han estado asociados a Sánchez» desde 2016 y ha subrayado que, tras los comicios de abril, no logró acordar con Podemos y tampoco «revalidar» el pacto del abrazo que tres años antes había sellado con Albert Rivera.
Por eso, Casado ha recalcado que «quien ha sido incapaz» de desbloquear la situación, «difícilmente» va a poder hacerlo tras el 10 de noviembre. «Tenemos que sacar un escaño más para desbloquear la situación», ha solicitado.
En este punto, ha señalado que si el PP gana va a «recuperar la estabilidad política y territorial» y detener la crisis económica «a tiempo» y «sin coste para las empresas y los españoles» gracias a un «plan para España claro, audaz, decidido y eficaz».
ANTE UN MICRÓFONO ABIERTO: «NOS VA A IR TODO MUY BIEN»
En cuanto a si sería posible una fórmula para la gobernabilidad entre PP y PSOE para salir de la parálisis, Casado ha recordado que ha acudido a sus reuniones con Sánchez con «mano tendida», ofreciendo hasta 11 pactos de Estado a los que el candidato socialista ha dado un «sonoro portazo. «Yo le he dicho que no puedo facilitarle la investidura, pero también porque España se queda sin alternativa», ha indicado.
Preguntado después si sería partidario de reformar el sistema electoral, ha señalado que la ley electoral vigente «no ha sido el problema de este bloqueo» y ha responsabilizado de nuevo a Sánchez, que no buscó «apoyo de los partidos de la oposición». «No se puede con 123 escaños gobernar solo», ha enfatizado.
Tras señalar que «el problema no es de la ley» sino de «los políticos incapaces de pactar», ha asegurado que «no es el momento ahora» de hacer ese tipo de reformas electorales sino de «apostar por candidatos que pueden desbloquear la situación y saben llegar a acuerdos a su izquierda y a su derecha».
Al término de ese acto, con el micrófono aún abierto, Casado ha confesado al moderador que es «optimista» en relación con las expectativas del PP ante los comicios, justo cuando faltan dos días para que arranque la campaña. «Nos va a ir todo muy bien», ha declarado Casado, justo el mismo día que se ha publicado el último sondeo del CIS, que da la victoria al PSOE con el 32,2% y entre 133 y 150 escaños, y sumaría mayoría con Podemos o con Ciudadanos.
«DRAMA» LA SITUACIÓN DE LAS EMPRESAS EN CATALUÑA
En su intervención en este congreso también ha aludido a la situación de las empresas catalanas, que ha calificado de «drama». De hecho, ha destacado que 4.000 han tenido que abandonar esa región, dejando de facturar 100.000 millones de euros. Es más, ha dicho que desde la declaración de independencia (DUI) se han destruido 8.000 empleos en Cataluña, con una bajada de la productividad de 1.033 millones de euros.
Por eso, ha garantizado ante los empresarios que si gana las elecciones generales y gobierna se «pondrá orden en las calles y se exigirá el cumplimiento de la ley» para que Cataluña «deslumbre de nuevo con su tejido empresarial y productivo».