Nuestros abuelos soportaban el calor del verano tirando de abanicos, sombreros y remojones. Nosotros, gracias al avance tecnológico podemos regular el clima a nuestro antojo y estar tranquilamente en nuestra casa, trabajo o coche, sin enterarnos de que la temperatura exterior está rondando los 40 °C. Los aparatos de aire acondicionado han mejorado nuestra calidad de vida de manera inimaginable y ya no podríamos vivir sin este electrodoméstico. Pero hay que saber que, aunque nos hagan más llevaderas hasta las canículas más horribles, su uso conlleva ciertos riesgos, algunos de ellos muy graves.
3ASPERGILLUS
Los hongos aspergillus (Aspergillus fumigatus y Aspergillus niger), no suponen un riesgo especialmente grave, al menos para la población general, Pero sí pueden llegar a ser muy peligrosos en personas vulnerables que padezcan enfermedades respiratorias crónicas o algún tipo de inmunodeficiencia, al igual que en ancianos y niños. Las esporas circulan en el aire que expulsan estos aparatos y son inhaladas y esto da lugar a un grupo de enfermedades respiratorias que se encuadran en lo que se conoce como aspergilosis. Algunas de las patologías derivadas son reacciones alérgicas, sinusitis, bronquitis, granulomas pulmonares y en los casos más graves, alcanzarían los vasos sanguíneos provocando trombosis.