El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha reunido durante cerca de 35 minutos con el Papa en el Vaticano en lo que ha constituido el primer encuentro entre ambos mandatarios.
Sánchez ha llegado puntual, a las 9:12 horas, a su cita en el Vaticano, acompañado de su esposa, Begoña Gómez, en una berlina de marca Masserati facilitada por el Gobierno italiano, algo habitual en estas ocasiones.
Nada más bajar del coche oficial que ha aparcado en el patio de San Dámaso han sido recibido por el regente de la Casa Pontificia, Monseñor Leonardo Sapienza. Ambos iban vestido de negro y llevaban mascarillas negras en el respeto del protocolo vaticano.
Está previsto que Sánchez también tenga una reunión bilateral con el secretario para las Relaciones con los Estados de la Santa Sede, Paul Gallagher.
La reunión ha tenido lugar como es habitual en la Biblioteca Privada del Palacio Apostólico.
En el séquito que seguía a Sánchez, que aterrizó este viernes en el aeropuerto de Fiumicino a las 19:50 horas, estaba presente la embajadora de España ante la Santa Sede, Carmen de la Peña. Francisco saludó al presidente y a su comitiva en la antesala de su biblioteca privada.
En una ceremonia revestida de solemnidad, los Gentiles hombres acompañaron a la delegación española hasta la Segunda Loggia donde se sitúa la biblioteca en la que el Papa recibe de normal a los jefes de Estado y de Gobierno.
Su encuentro con el Santo Padre se produce después de la fallida moción de censura presentada por Vox. Sánchez estuvo el pasado martes en Roma para participar en el 17º Foro de Diálogo Italia-España en la que se reunió con el primer ministro del país anfitrión, Giuseppe Conte. La reunión se produce en un momento en el que el Ejecutivo impulsa el proyecto de ley de la eutanasia y la reforma de la ley del aborto.