El Pleno del Ayuntamiento de Madrid ha condenado por unanimidad de los cinco grupos con representación en Cibeles (PP, Cs, Más Madrid, PSOE y Vox) los disturbios acaecidos en la Puerta del Sol el pasado 17 de febrero tras la manifestación en contra de la entrada en prisión del rapero Pablo Hasél.
Así, se ha dado el visto bueno a esta propuesta, presentada por PP y Cs, para condenar de forma firme los disturbios causados «por los violentos» en la tarde noche del 17 de febrero en el centro de la ciudad, «así como de cualquier manifestación que los secunde o trate de justificar».
También han trasladado «su confianza absoluta en el Estado de Derecho y en la calidad democrática del país, representados en las instituciones y leyes y, en grado último, por la Constitución Española, garante de todas las anteriores».
Vox, por su parte, ha presentado otra moción de urgencia en el mismo sentido. PSOE y Más Madrid han votado en contra de su totalidad, mientras que PP y Cs han dado el visto bueno a todos los puntos salvo a uno de ellos, que no ha salido adelante.
En concreto, no se ha apoyado por ningún grupo instar a la Delegación de Gobierno «a prohibir manifestaciones o concentraciones que tengan por objeto ensalzar a personas que hayan sido condenadas.
Además, han conseguido los apoyos necesarios para que el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, a instancias del Pleno, envíe una carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «para que tome medidas con el fin de que no vuelva a reproducirse ningún tipo de manifestación de apoyo a este tipo de conductas totalitarias por parte de sus socios de gobierno».
También se ha «reprobado el comportamiento de enaltecimiento de la violencia realizado por el portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, respecto a lo sucedido en Madrid» por alentar «este terrorismo callejero».
La bancada de Más Madrid también ha conseguido sacar adelante su propia moción de urgencia sobre estos disturbios, a la que PP y Vox han mostrado su rechazo votando en contra de la totalidad.
PSOE y Cs la han apoyado, salvo uno de los puntos, por lo que no ha salido adelante la elaboración de un protocolo de actuación que garantice una «actuación proporcionada de las fuerzas y cuerpos de seguridad en situaciones potencialmente peligrosas».