Diez motivos para no recurrir siempre a la aspirina

La aspirina desde hace muchos años es utilizada para muchas patologías, en especial las personas que tienen por error  auto medicarse. En los tiempos de nuestros abuelos era la que curaba todos los dolores.

Con el tiempo fueron saliendo  diferentes analgésicos y fueron realizando diferentes estudios sobre los efectos secundarios de la aspirina y siempre ha habido personas que no las pueden consumir. El abuso de su consumo trae diferentes problemas en nuestro organismo.

Alergia a otro de sus componentes

Alergia a otro de sus componentes

El resto de los componentes de la aspirina son  básicamente excipientes: Ácido cítrico, carbonato de sodio, citrato de sodio e hidrogeno carbonado. Son muy pocos los casos de alergia a estos componentes.

No obstante las reacciones alérgicas a alguno de ellos pueden ser similares al del ácido acetilsalicílico, pero en menor escala. Lo más recomendable en estos casos es no consumirla, o hacerlo bajo prescripción y revisión médica.