La recuperación del turismo y el regreso a los niveles prepandemia se han puesto en marcha en Semana Santa. Hoteles, aerolíneas, cruceros y agencias de viaje hacen un balance muy positivo de un período estival, tradicionalmente reservado para el turismo nacional, y auguran que la temporada alta de este año puede ser histórica por lo prolongada que puede ser, ya que podría durar hasta seis meses (de mayo a octubre) en virtud de las reservas de las grandes hoteleras. Hoteles, bares, restaurantes y transporte han recuperado a todas sus plantillas (el turismo ya empleaba en marzo a 2,4 millones de trabajadores en marzo, por encima de 2019) para dar respuesta a una demanda que podría llegar a su cenit en julio y agosto.