La situación de los vehículos de la Policía Nacional: furgonetas que se incendian solas y sin airbag

La situación a la que se enfrenta la Policía Nacional cada vez es más complicada debido al material y vehículos con los que cuentan para llevar a cabo los servicios. Hay una larga lista de cuestión que han colaborado para empeorar la relación de los agentes. El último episodio que complica todavía más la relación del cuerpo armado con el ministros del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se trata del mal estado de los vehículos policiales. En especial, son las furgonetas de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) las cuales se prenden solas o en las cuales no saltan los airbags. Se trata de una situación que pone en peligro la vida y salud de los agentes que cada día se ven obligados a llevar a cabo los servicios en estos vehículos.

Se trata de una cuestión que no han dudado en denunciar desde el sindicato mayoritario de la Policía Nacional (JUPOL). Desde esta asociación han pedido una renovación «urgente» de todos los vehículos policiales que se encuentran en mal estado. En concreto, ponen el foco en las furgonetas de la Unidas de Prevención y Reacción (UPR) las suponen se han convertido en todo un peligro para la salud de los agentes. Así, a través de su cuenta de Twitter han compartido un video en el que puede apreciarse el estado de estas furgonetas. En esa reproducción destacan que se sienten desprotegidos y que no cuentan con los medios adecuados. Y es que, el principal problema de las furgonetas de la UPR se incendian solas y, además, los airbags no saltan cuando se produce una colisión.

Desde JUPOL han incidido en que necesitan vehículos aptos para sentirse protegidos y con los que poder proteger a los ciudadanos. Una cuestión que empeora todavía más si se tiene encuentra el departamento que cuenta con estas furgonetas. Y es que, la UPR lleva a cabo dispositivos especiales de prevención de la delincuencia, mantenimiento del orden público y la seguridad ciudadana, apoyo a otras Unidades, Servicios o Instituciones, en dispositivos puntuales y reacción e intervención ante cualquier situación que requiera una actuación inmediata. Es decir, son unas unidades destinadas a la prevención, mantenimiento y, en su caso, restablecimiento del orden y la seguridad ciudadana. Por este motivo, necesitan contar con unos recursos en perfectas condiciones para poder desarrollar su trabajo correctamente.

Esta no es una situación aislada, sino que se suma a la larga lista de problemas que afectan a las condiciones laborales de los agentes y que repercuten en el desarrollo de sus servicios y funciones. Y es que, desde hace tiempo relación entre Fernando Grande-Marlaska con los agentes del cuerpo armado es muy tensa y cada vez más distantes, dado que mientras que el ministros no deja de beneficiar a los altos cargos, los agentes de la policía deben soportar las decisiones de este que contribuyen a empeorar todavía más su situación laboral. Así, al hecho de que los coches sean obsoletos, se incendien solos y no se activen los airbag, una cuestión que pone en peligro su vida, también deben realizar los servicios sin la ropa de abrigo adecuada a cada territorio. Y es que, los agentes de la Policía Nacional que se encuentran en Canarias cuentan con las mismas prendas que los destinados en los Pirineos.

LA POLICÍA NACIONAL TAMPOCO CUENTA CON LOS UNIFORMES ADEACUADOS A LAS CONDICIONES CLIMATOLÓGICAS DE CADA TERRITORIO

Los uniformes de los agentes de Policía Nacional son el último capítulo de unas complejas relaciones entre el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, con los miembros del cuerpo armado. Distintas asociaciones de Policía Nacional están denunciando que la ropa de abrigo que se está suministrando es exactamente la misma para los agentes que se encuentran destinados en las Islas Canarias que los que trabajan en los Pirineos.

El colmo de esta situación llega desde las Redes Sociales. La cuenta en Twitter de la Policía Nacional ha compartido un post en el que da cuenta de las bajas temperaturas que ha traído el invierno, que han obligado a los agentes ha ponerse la ropa de abrigo, «pero no nos quitamos la sonrisa». Una cuestión que sería normal si no fuera porque en todos los puntos de España cuentan con la misma ropa, ya sea en la zona norte o en el sur, los agentes tienen la misma ropa para combatir las temperaturas de cada región. Una cuestión que no han dudado en denunciar los distintos sindicatos de este cuerpo armado.