Las estrictas órdenes de la reina Letizia a la princesa Leonor para no hacer “un Froilán”

Formar parte de una familia real puede parecer un auténtico cuento de hadas para muchos. Y en realidad, puede que sea así en muchos sentidos. Los privilegios de formar parte de ella están fuera de toda duda, pero también sus inconvenientes. Dar una imagen acorde a tan alta posición social es también una obligación que gran cantidad de personas no soportarían. Resulta difícil saber qué se le pasará por la cabeza en muchas ocasiones a gente como la princesa Leonor, pero de lo que no cabe duda es que los protocolos impuestos por su madre, la reina Letizia, y la propia Casa Real no son lo que se dice pocos.

En este artículo repasamos algunos de ellos, desde los más evidentes a otros capaces de sorprender incluso a los más versados en asuntos reales.

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La forma de vestir de la princesa Leonor

Cualquier chica adolescente le da una gran importancia a su manera de vestir. Es algo natural desde que el mundo es mundo. Es una edad en la que todas las mujeres (y los hombres) se están desarrollando en todos los sentidos, dando el salto a la vida adulta, y ello implica encontrar un estilo propio. No obstante, cuando una es princesa y heredara el trono de un país como España, las limitaciones son evidentes.

El estilo de la princesa Leonor, por mucho que pueda depender de sus gustos propios, no puede exceder algunas costumbres. Por ejemplo, utilizar vestidos y faldas que, como es natural, no sean demasiado cortas. Siempre, eso sí, procurando transmitir una imagen moderna y actual, por así decirlo.

 

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