El aceite es uno de los ingredientes indispensables para que podamos hacer bien prácticamente cualquier elaboración. Hay algunas preparaciones de fritura, como es el caso de los empanados, que generan que este líquido viscoso se vaya poniendo cada vez más negro hasta que termina convertido en una masa espesa llena de grumos requemados. Cocinar en estas condiciones se vuelve insalubre, por lo que conviene tener siempre el aceite lo más limpio posible.
5Consejos para que el aceite no coja sabor al freír
Otro momento en el que corremos peligro con el aceite es cuando tenemos que freír diferentes alimentos para una misma comida. Cuando esto sucede, lo mejor es cambiar de aceite para que el sabor de los segundos no se mezcle con el de los primeros. No obstante, en este caso también hay trucos para que no tengas que cambiar el líquido viscoso. Puedes utilizar cáscara de limón en la fritura. Cuando esté dorada ya será hora de retirarla. El cítrico hace que el sabor no se vea alterado, sobre todo en las instancias en las que cocinamos pescado.
