Un frustrado Sánchez Llibre se lanza al ataque del Gobierno por la salida de Ferrovial

La salida de Ferrovial ha puesto al Gobierno en una posición delicada. La empresa española, que se ha nutrido de varios contratos públicos y se acogió a varios ERTE durante la pandemia, se ha puesto en el ojo del huracán por lanzar su sede a Países Bajos. Desde Moncloa han iniciado una guerra contra los empresarios a cuenta de la salida de Ferrovial. Desde el Gobierno se centran en hablar de la actitud poco patriótica de la compañía del IBEX 35 mientras otros empresarios, como el aspirante a dirigir la CEOE (aunque ya se ha quedado sin su premio) Josep Sánchez Llibre, se han dedicado a pedir una «reflexión» al Gobierno por su salida dado que entienden que es por los elevados impuestos que se cobran en España.

La guerra está servida, pero el problema es que nadie sabe muy bien cómo abordar este problema. En Moncloa tienen claro que pueden sacar rentabilidad de esta salida para ganar más votos y demonizar a los empresarios. Sin embargo, los empresarios han visto el cielo abierto. Creen que pueden denunciar el infierno fiscal en el que se ha convertido España, según ellos, desde que Pedro Sánchez está.

LA RESPUESTA DE SÁNCHEZ LLIBRE

El presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, ha pedido al Gobierno español una «reflexión sincera» sobre la decisión de Ferrovial de trasladar su sede social de España a Países Bajos para buscar soluciones ante un posible efecto cascada que pueda generar entre otras compañías españolas.

Lo ha dicho este viernes en declaraciones a los periodistas tras un coloquio organizado por la patronal y PwC bajo el título ‘Retos energéticos en un entorno incierto’ y en el que también han participado el presidente de Naturgy, Francisco Reynés, y el socio responsable de la consultora en Cataluña y Andorra, Ignacio Marull.

«Entiendo que estamos en una economía de mercado liberal», ha asegurado Sánchez Llibre, y ha añadido que «todo el mundo tiene el derecho y la libertad de tomar las decisiones que van en la mejor dirección que consideren sus accionistas e inversores».

El presidente de la patronal ha recordado que la entidad quiere que vuelvan a Cataluña las empresas que decidieron trasladar su sede social a otras comunidades como Madrid, Valencia o Baleares, y ha reiterado que es necesario pensar medidas para evitar que se produzcan más traslados.

Ha apuntado que los empresarios buscan seguridad jurídica, calidad de la norma jurídica y confianza y que, si no se producen estos tres puntos, «la gente toma decisiones».

Asimismo, Sánchez Llibre ha negado que la decisión de Ferrovial tenga que generar una situación de alarma: «No tenemos que darle más importancia».

ESCRIVÁ TAMBIÉN

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha considerado que el anuncio de Ferrovial de trasladarse fuera de España no debería «para nada» plantearse como un asunto que genere un «problema en particular» ante el creciente flujo de inversión extranjera en España.

Escrivá se ha referido a este asunto antes de participar en un desayuno-coloquio en Valladolid organizado por la Asociación Para el Progreso de la Dirección (APD), donde ha insistido en que España registra una «aceleración» de la inversión extranjera en los últimos años, sobre todo en lo referido a empresas tecnológicas que «se están expandiendo y creciendo en España».

El ministro ha defendido que la inversión directa extranjera sitúa al país en los niveles «más altos» de la historia y supone un 2,7 por ciento del PIB nacional.

«Lo vemos todos los días, porque acuden a nosotros empresas para que se dé permiso trabajo para los directivos de las empresas, para los trabajadores más especializados que vienen», ha explicado.

Así, ha defendido que decisiones como la de Ferrovial no deberían «para nada» plantearse como un tema que genere un «problema particular».