La ensalada César se ha convertido en una modalidad de ensalada asociada a lo saludable. Sin embargo, la presencia de algunos ingredientes como la salsa César hacen peligrar esta denominación. Sin embargo, si preparas esta receta de ensalada César conseguirás un primer plato que no engorda y que está tan rica o más que la original.
¿Sabías que el origen de esta ensalada tan popular se encuentra en México? Allí emigró Cesar Cardini, un chef italiano que se instaló en la nombrada y afamada Tijuana (sí, la de los picantes más picantes). Desde allí, en varios de sus restaurantes y casi por casualidad, dio con la receta perfecta para hacer una ensalada que hoy es popular en el mundo entero. Te mostramos a continuación cómo elaborar una ensalada César que no engorda pero que está riquísima.
4ADIÓS SALSA PERRINS, ADIÓS MAHONESA
Tanto si vas a hacer la salsa César 100% casera con mahonesa como si optas por una semielaboración partiendo de la salsa Perrins, en ambos casos estás sumando calorías de más a una ensalada que podemos convertir en light con este sencillo sustituto: yogurt desnatado. En efecto, la base de la salsa Perrins es yogur, solo que dulcificado. Podemos eliminar este componente y quedarnos únicamente con la parte saludable del yogur. Si quieres darle un toque de intensidad, añade una cucharadita de mostaza y conseguirás una ensalada César más light pero con todo el sabor. El resto de ingredientes no hay que modificarlos.
