La energética italiana Enel, principal accionista de Endesa, se anotó un beneficio neto atribuido de 2.505 millones de euros en el conjunto de los nueve primeros meses de 2021, lo que equivale a un descenso del 14,2% en comparación con el mismo periodo del año pasado, según se desprende de la cuenta de resultados que ha publicado este jueves la empresa.
Los ingresos totales en el periodo fueron de 57.914 millones, un 17,1% más. La compañía ha destacado que el cambio se debe a la mayor facturación de todas las líneas de negocio por los mayores volúmenes de energía vendida. Este incremento de los volúmenes ha compensado la caída de ingresos de América Latina.
La cifra de negocios de la rama de generación térmica creció un 30% en los nueve primeros meses del año actual, hasta 23.055 millones, al tiempo que la división de infraestructuras y redes se situó en 14.930 millones, un 4,6% más.
Los ingresos de mercados finalistas crecieron un 9,9%, hasta 23.612 millones de euros, mientras que la división de renovables se situó en 6.346 millones de euros, un 20,1% más. Los servicios supusieron unos ingresos de 1.352 millones, un 4,9% más, y la filial Enel X se situó en 1.036 millones, un 37% más.
«En los primeros nueve meses de 2021 seguimos con nuestra senda de crecimiento industrial, registrando una mejora en el rendimiento operativo de todas nuestras líneas de negocio», ha indicado el consejero delegado de Enel, Francesco Starace.
Los costes totales entre los meses de enero y septiembre fueron de 52.749 millones de euros, por lo que experimentaron un avance del 26,1%.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) ordinario de Enel se contrajo un 3,9% respecto al periodo anterior, hasta 12.631 millones de euros. De su lado, el resultado neto de explotación (Ebit) se redujo en un 10,3%, hasta 6.254 millones.