La subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba, ha visitado las instalaciones del Grupo Nores en Marín (Pontevedra) a última hora de la tarde de este martes para demostrar el «apoyo y la colaboración» del Estado a las familias del ‘Villa de Pitanxo’, el buque con 24 personas a bordo naufragado frente a la isla de Terranova (Canadá).
En declaraciones a los medios tras un encuentro con los responsables de la compañía, Larriba ha trasladado que el Gobierno, la Subdelegación y la Delegación del Gobierno en Galicia estarán a su «entera disposición» a «cualquier hora del día y de la noche».
«Es una tragedia enorme, hay mucho dolor detrás de este acontecimiento», ha lamentado, desde el mismo punto al que varios familiares se han acercado durante todo el día para tratar de obtener algo de información, aunque por ahora sin éxito.
«LOS DATOS PUEDEN VARIAR»
El ‘Villa de Pitanxo’ naufragó de madrugada frente a las costas de Terranova y, de acuerdo con los últimos datos oficiales, hay siete fallecidos, 14 desaparecidos y tres personas rescatadas con vida. De estas últimas, uno es el patrón del barco, Juan Padín, según ha confirmado la subdelegada después de hablar con los armadores.
Con todo, Larriba ha optado por ser cauta en sus declaraciones: «La inmediatez y la provisionalidad de las informaciones y de los datos pueden variar de un momento a otro. Por tanto, vamos a ser muy cautos y prudentes y vamos a esperar a que los datos estén más completos».
Por ahora, ha añadido, «todos los medios están volcados en localizar» a las personas desaparecidas. Una vez concluidas estas operaciones, «habrá que analizar las causas», ha apostillado.
De los 24 tripulantes que iban a bordo del ‘Villa de Pitanxo’, 16 tienen nacionalidad española, cinco la peruana y otros tres la ghanesa. Entre los 16 españoles, figuran al menos tres vecinos de Cangas, otros tres de Marín, uno de Moaña, uno de Bueu, uno de Huelva y otro de Canarias.
En el municipio de Marín, en las inmediaciones de Pesquerías Nores, se ha podido ver a familiares y amigos de la tripulación angustiados ante la falta de información sobre lo sucedido con sus seres queridos.
Ante las preguntas de los medios, todos los que han entrado y salido de las instalaciones respondían que poco o nada habían conseguido saber acerca de sus allegados.
