Estofado ligero de lentejas para días de entretiempo

Se acerca la temporada de guisos calentitos y platos de cuchara que tanto nos gustan. Uno de los platos más tradicionales y fáciles de preparar son las lentejas, una de nuestras legumbres preferidas. Según los expertos, los españoles no consumimos tantas legumbres como deberíamos (lo ideal sería unas 3 o 4 veces por semana), así que ahora que lo pide el cuerpo, es el momento de hacer espacio en nuestra mesa a los potajes y cocidos tan habituales en nuestra gastronomía. Hoy te proponemos unas lentejas ligeras para esos días en los que aún no apetece demasiado tomar un plato demasiado contundente.

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lentejas

Una vez listo el estofado de lentejas, solo hay que emplatar y disfrutar. Se puede añadir un poco de huevo duro picado por encima, o sencillamente acompañar con buen trozo de pan. Si sobran lentejas las podemos guardar en un táper hermético en la nevera y aguantarán 3 o 4 días. Como la mayoría de los guisos, al día siguiente estarán mucho más ricas porque los sabores se habrán mezclado mucho mejor. Pero es importante meterlas en el frigorífico en cuanto estén templadas.