El PSOE cierra todas las puertas a Pilar Llop y deja a Juan Lobato a los mandos del futuro de la ministra

La ministra de Justicia, Pilar Llop, se queda sin opciones. Su aterrizaje en el Ayuntamiento de Madrid ya no es una certeza después de que las últimas informaciones filtradas por Ferraz dejen entrever que Luis García Montero será previsiblemente el candidato al Consistorio por parte del PSOE. Con todo esto, la ministra empieza a ver que se le cierran todas las ventanas de oportunidad excepto una que ni siquiera depende de ella. Desembocar en Madrid era la única opción, dado que nadie en Moncloa se plantea renovarla como ministra ni mantenerla hasta el final de la legislatura, pero el Ayuntamiento de la capital ya no es un destino viable. Solo le queda la Asamblea de Madrid. Y eso siempre que Juan Lobato, candidato a la Comunidad y recién hijo predilecto del PSOE, dé el visto bueno.

Las salidas de Pilar Llop se cierran. Desde el PSOE aseguran que Pedro Sánchez ha perdido la fe en ella y en la capacidad que pueda tener la ministra de Justicia para levantar la imagen del partido en una zona tan hostil para los socialistas como puede ser Madrid. Ya sea en el Ayuntamiento o en la Comunidad de Madrid, lo cierto es que las salidas que antes se veían claras ahora están cada vez más oscuras. Su pervivencia en el ministerio será por poco tiempo, siempre que Pedro Sánchez lance esa crisis de Gobierno que tiene pensada en enero, pero su futuro político se ha convertido en un auténtico misterio que nadie sabe desentrañar.

Madrid era el cementerio de elefantes perfecto para los ministros, pero Sánchez ha tenido un arrebato de responsabilidad en la capital y ha decidido intentar apostar fuerte por ella. Ahora, tener ministros con poco tirón como puede ser María Reyes Maroto, ministra de Industria, o la propia Llop se ha convertido en un pequeño contratiempo porque ocupan espacio, ego y no tienen la capacidad política para levantar el PSOE de Madrid que se esperan en Moncloa. Con todo esto, desde Ferraz dejan claro que solo ven una salida posible para la magistrada: ir a la Comunidad de Madrid con Juan Lobato en calidad de diputada. Esto, o dejarla que vuelva a su puesto por oposición. Pero nadie se plantea que vaya a liderar una candidatura a estas alturas después de que Luis García Montero haya avanzado en sus negociaciones con el PSOE para ser candidato en la capital.

Aún así, y pese a que Ferraz se guarda el as en la manga de colocar a Llop a capón en las listas de la Comunidad de Madrid, lo cierto es que Juan Lobato tiene mucho que decir. El secretario general del PSOE-M ha ganado muchos galones ante su partido. Su capacidad de trabajo le ha avalado lo suficiente, pero también ha conseguido ganarse la confianza de Moncloa y de Ferraz al mismo tiempo cuando nadie veía claro en un principio la idea de presentar a Lobato como candidato ante Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid. Estas mismas fuentes aseguran que Lobato tiene mucho que decir en las listas, pese a que hay margen para colocar a una exministra. Pero si Lobato prefiriese a otra persona, como es el caso de María Reyes Maroto (con quien mantiene una buena relación), también se podría estudiar.