El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, se medirán el próximo miércoles en un debate parlamentario en el Pleno del Congreso convocado para hablar sobre la última cumbre europea y Marruecos. Este duelo tendrá previsiblemente como telón de fondo el fuego cruzado de PSOE y PP por la corrupción, tras los reproches mutuos de estas semanas por las actividades de la mujer del jefe del Ejecutivo, Begoña Gómez, y la pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso.
La tensión política se ha disparado en el último mes. Los ‘populares’ han atacado a los socialistas con el llamado ‘caso Koldo’ sobre presuntas mordidas en la compra de mascarillas durante la pandemia, mientras que el PSOE ha exigido la dimisión de Ayuso por la denuncia de presunto fraude fiscal que afecta a su novio.
Ese nivel de crispación también lo han visualizado Sánchez y Feijóo en las dos últimas sesiones de control del Congreso. El jefe del Ejecutivo llegó a pedir varias veces a Feijóo que exija la dimisión de Ayuso aunque le «cueste el puesto» como a su antecesor, Pablo Casado. Y el líder del PP, por su parte, le acusó de poner el «ventilador» y prometió una oposición «implacable» en el caso Koldo: «Señor Sánchez, es su trama».
Los ‘populares’ consideran que este caso no ha hecho más que empezar y que hay que esperar al «volcado de los 23 móviles que la Guardia Civil incautó a Koldo García, exasesor del exministro José Luis Ábalos. Además, Feijóo ha amenazado con una investigación parlamentaria «específica» sobre la relación de la mujer de Sánchez con Air Europa y por las cartas de apoyo a empresas reveladas por ‘El Confidencial‘, si bien en este momento no se plantea citarla a comparecer en la comisión de investigación que se ha creado en el Senado.
EN PLENA CAMPAÑA VASCA Y A LAS PUERTAS DE CATALANAS Y EUROPEAS
Este duelo parlamentario entre Sánchez y Feijóo se producirá en plena campaña para las vascas del 21 de abril, y con ambiente preelectoral en todo el arco parlamentario por las otras dos citas con las urnas fijadas en el calendario: catalanas el 12 de mayo y europeas el 9 de junio.
Feijóo ha asumido el clima de crispación que hay en España al reconocer públicamente que la clase política actual es la «peor de la democracia». «No estoy haciendo salvedades», respondió el miércoles cuando se le preguntó si incluía al PP, si bien subrayó que cada uno tiene su responsabilidad. Así, recordó que él ha planteado a Sánchez hasta seis pactos de Estado pero sin siquiera tener «acuse de recibo». «No será porque no lo he intentado», apostilló.
El presidente del Gobierno, que ha acusado a Feijóo de hacer una oposición «tóxica e inflamable», ha vinculado también la crispación política actual con el bloqueo que, a su juicio, mantiene el PP al no renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que lleva más de cinco años caducado.
En el Gobierno dan por hecho que el debate del miércoles se desarrollará en el mismo tono bronco de las últimas semanas e insisten en culpar al PP, que a su juicio es el que «ensucia» todo. En este sentido, fuentes de Moncloa han indicado a Europa Press que ven difícil que los populares asuman la responsabilidad y el sentido de Estado y consideran que seguirán «embarrando».
RELACIONES CON MARRUECOS Y VIAJE A RABAT
Según figura en el orden del día, Sánchez comparecerá el 10 de abril ante el Congreso para dar cuenta del estado de las relaciones con Marruecos y de lo tratado en el Consejo Europeo de los pasados 21 y 22 de marzo.
El jefe del Ejecutivo dará cuenta del viaje en el que fue recibido en audiencia por el rey Mohamed VI, aunque no logró que Rabat se comprometiese con una fecha concreta para la apertura de las aduanas de Ceuta y Melilla.
Sánchez reconoció entonces que por parte española «está todo listo» para que la aduana de Melilla pueda reabrir y la de Ceuta pueda empezar a funcionar, pero por parte marroquí aún quedan cuestiones que resolver. Según precisó, el primer ministro, Aziz Ajanuch, le aseguró que «tan pronto» como se resuelvan se dará este paso incluido en la hoja de ruta pactada en 2022.
El PP ya pidió a finales de febrero la comparecencia de Sánchez para explicar ese viaje a Marruecos y poco después sacó adelante en el Congreso una proposición no de ley en la que exige al Gobierno retomar la política de neutralidad y recuperar el consenso político con el Sáhara, que contó con voto negativo del PSOE pero sí con el apoyo de Sumar.
‘Génova’ mantiene en este momento el hermetismo sobre la intervención de Feijóo y no ha concretado si reclamará explicaciones sobre el cambio de posición sobre el Sáhara o si pedirá cuentas por la información que incluye el móvil del presidente y que le robaron con el programa ‘Pegasus’.
Hace unas semanas, el vicesecretario de Institucional del PP, Esteban González Pons, ya avanzó que reclamarán acceso al teléfono de Sánchez en la comisión de investigación sobre Pegasus creada en el Congreso.
CONSEJO EUROPEO Y PALESTINA
Respecto a la cumbre de líderes europeos, Sánchez destacará, según indican fuentes de Moncloa, los acuerdos alcanzados por los socios sobre la guerra en Israel y Gaza y la situación en Oriente Medio y en el compromiso alcanzado por España, Irlanda, Eslovenia y Malta para el reconocimiento de Palestina como Estado.
El Gobierno ya ha confirmado que hará oficial este reconocimiento antes del verano y mediante una resolución del Consejo de Ministros, aunque posteriormente Sánchez acudirá al Congreso para informar a los grupos parlamentarios.
En este sentido, Sánchez también subrayará que las conclusiones alcanzadas por los 27 sobre el conflicto en Gaza reflejan la posición que mantiene España, llaman a un alto el fuego, a la apertura de corredores terrestres, a que Israel no inicie una ofensiva en Rafá y a mantener el apoyo a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA)
También hará mención, previsiblemente, a la reciente gira por la región y el bombardeo de Israel contra un convoy de la ONG World Central Kitchen del cocinero español José Andrés, en la que fallecieron 7 cooperantes, así como a la reciente decisión de Tel Aviv de abrir nuevos accesos a la ayuda humanitaria.
El PP de Feijóo no se ha posicionado sobre la propuesta de Sánchez sobre un Estado palestino, pero sí lo ha hecho el expresidente José María Aznar para rechazarla. «A los que se refieren a la creación de un Estado palestino, ¿a qué se refieren con un Estado palestino? Eso no existe. Eso es absurdo», dijo el expresidente en un acto de FAES.
LA AMNISTÍA Y LAS LEYES DE MEMORIA
Sánchez explicará además el compromiso de los socios para reforzar la industria de Seguridad y Defensa ante un escenario de amenazas y también el acuerdo de los socios para pedir a la Comisión Europea relajar las normas para canalizar más ayudas nacionales a los agricultores, después de semanas de protestas del sector.
En plena tramitación de la Ley de Amnistía en el Senado y con la campaña catalana a la vuelta de la esquina, no es de extrañar que los grupos parlamentarios aludan en el debate del Congreso a esta norma, que ya copará el protagonismo este lunes con motivo de la Comisión General de Comunidades Autónomas que ha impulsado el PP.
Otro de los asuntos en el foco mediático es la Ley de Memoria, que también podría salir e el debate después de que el Gobierno haya anunciado hace unos días que recurrirá las normas de Memoria del PP y Vox ante la ONU, el Parlamento Europeo y el Consejo de Europa. Desde ‘Génova’ afean a Moncloa que cada vez que hay elecciones saquen el franquismo. «Es un clásico», resumió Feijóo esta semana, para reiterar que si gobierna derogará la Ley de Memoria de Sánchez.